Por lo general, las jaracandas pintan de violeta las calles de la Ciudad de México durante la primavera y el otoño, pero en esta ocasión las primeras flores aparecieron en plena temporada invernal.
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Este suceso se volvió viral por una fotografía compartida en X, ya que generó cierta preocupación entre los usuarios de dicha red social porque todavía faltan dos meses para qué empezarán a florecer.
De acuerdo con el doctor Marcelo Rodrigo Pace, del Instituto de Biología de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), la presencia de este suceso se deriva por el cambio climático.
“El incremento de las temperaturas provoca que el sistema vegetal y la anatomía de las jacarandas se caliente antes de tiempo y eso puede producir una floración precoz o tardía”.
— Marcelo Rodrigo Pace.
En la revista Wired, el botánico explicó que si la floración es precoz puede debilitar el árbol, ya que las jacarandas pierden los nutrientes que utilizaron para florecer y esto provocará cambios en el ecosistema capitalino con una segunda etapa menos vigorosa, es decir, que tarden en crecer o que las hojas se caigan con facilidad.
Rodrigo Pace recalcó que el florecimiento de las jacarandas en invierno es grave, “los árboles quedan vulnerables a plagas y enfermedades que incluso afectarían las cadenas alimenticias de aves e insectos. Este tipo de floración produce el néctar para alimentar especies endémicas de la capital”, aseguró.
¿De dónde provienen las jacarandas?
Son árboles originarios de Brasil que miden 20 metros de altura. Las jacarandas fueron traídas a la capital por Sanshiro Matsumoto y Tatsugoro Matsumoto, empresarios jardineros de Japón, que entre 1920 y 1924 le propusieron al presidente Álvaro Obregón sembrarlos en las calles principales de la capital.
Por ello, las jacarandas son un símbolo de la Ciudad de México que marcan el inicio de la primavera.
