El alcalde de Monterrey, Luis Donaldo Colosio Riojas, pidió al presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) el indulto para Mario Aburto, el asesino confeso de su padre, Luis Donaldo Colosio, quien fue asesinado en 1994 cuando era candidato priista a la presidencia en Lomas Taurinas, Tijuana, Baja California.
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Colosio Riojas expresó ante los medios de comunicación su petición al primer mandatario, después de ser cuestionado acerca del intento de la Fiscalía General de la República (FGR) por retomar el caso de Aburto bajo la teoría de que existió una conspiración desde el aparato de Estado para acabar con la vida del candidato presidencial, con responsabilidad directa del expresidente Carlos Salinas de Gortari y el extinto Centro de Investigación y Seguridad Nacional (Cisen).
Al respecto, Colosio Jr. indicó que es momento de cerrar el capítulo sobre la muerte de su padre–en un 1994 marcado por ‘turbulencias políticas’ en el PRI y en México– por respeto a su familia y para permitir que sanen a 30 años de los hechos de Lomas Taurinas.
“Apelando a la compasión del presidente yo diría que mejor indulte a Mario Aburto, que ponga un carpetazo final a este asunto, que permita que tanto mi familia como México sanemos”, expresó Colosio Riojas.
Además, afirmó que el perdón será la ruta para la reconciliación y señaló que la justicia mexicana no actuó de forma correcta cuando ocurrió el magnicidio de Colosio.
“Que iniciemos un camino hacia la reconciliación a través del perdón, pero sobre todo al respeto a dejar esto en manos de otra justicia, porque la justicia mexicana quedó a deber en su momento y hoy lo que queremos es vuelta a la página”, dijo el alcalde de Monterrey.
FGR sufre revés por caso Aburto
La Fiscalía General de la República (FGR) pretendía revivir el caso de Mario Aburto, el asesino confeso de Luis Donaldo Colosio, a 30 años de los hechos de Lomas Taurinas, al implicar directamente al Cisen y al gobierno de Salinas de Gortari.
Por tal motivo, la FGR pidió una orden de aprehensión por homicidio contra el exagente del Cisen, José Antonio Sánchez Ortega; sin embargo, esta fue rechazada por el juez federal Jesús Alberto Chávez Hernández, al argumentar que no hay pruebas suficientes para relacionar a Aburto y al exagente del Cisen en el magnicidio.