México tiene un ‘problema de peso’, la población padece la pandemia silenciosa de la obesidad y sobrepeso que puede afectar al 85% de los mexicanos y que cada año cobra miles de vidas debido a diversos problemas relacionados, como por ejemplo diabetes, hipertensión, enfermedades renales y malestares cardiovasculares.
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México se ubica en los primeros lugares de este padecimiento, alertan profesionales médicos a propósito del Día Mundial de la Obesidad que se conmemora el 4 de marzo, a propuesta de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para informar y sensibilizar al respecto.
La Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (ENSANUT) indica que 75.2% de la población mexicana de 20 años y más padece estas dos enfermedades crónicas.
Mientras que el Atlas Mundial de la Obesidad revela que México ocupa el quinto lugar mundial en prevalencia de este problema solo detrás de Estados Unidos, China, Brasil e India, al registrar cerca de 36 millones de personas con este padecimiento.
Diversos factores como sedentarismo, una oleada de alimentos procesados, comida rápida, entre otros, ha provocado que este problema de salud se triplique desde 1975, la OMS reveló que actualmente más de mil 900 millones de adultos de 18 o más años tenían sobrepeso a nivel mundial, y de ellos, más de 650 millones eran obesos.
Además, se estima que la obesidad causa la muerte de unas dos mil 800 millones de personas al año a nivel global.
En el caso particular de México, el abrumador panorama implica que 85% de los mexicanos podrían tener obesidad antes de 2050, ya que, el sobrepeso afecta a más del 75% de las personas adultas, y al 35.6 % de la población infantil.
Entre 1990 y 2023, la obesidad y el sobrepeso infantil aumentaron 120% en México y esto empieza a cobrar factura: ya hay aproximadamente 600 mil niños y adolescentes con diabetes mellitus, y entre ellos cerca de 72 mil tienen diabetes tipo 2, de acuerdo con datos de la Secretaría de Salud.
Esta situación es más aguda en las zonas urbanas, donde el acceso a alimentos procesados y el sedentarismo contribuyen a exacerbar la crisis, advierten los especialistas.
Obesidad, un antecedente cultural
Todo esto ocurre en el contexto del fuerte lazo de la cultura mexicana con la comida, explica el doctor Carlos Zerrweck, médico especialista en cirugía general, bariátrica y endócrina del Centro Médico ABC Santa Fe durante una conversación sobre mitos y realidades de la obesidad y sobrepeso.
Acompañado por un equipo de profesionales como la psicóloga bariatra Yunuhén Juárez o la nutrióloga bariatra Gladys Güitrón, emprenden una titánica labor para concientizar a la población sobre los efectos del sobrepeso e impulsar hábitos más saludables que mejoren la calidad de vida.
“Imagínate cargar con un garrafón de agua de 20 litros, o dos, o tres, yo estaría cansadísima”, refiere la doctora Juárez a propósito del ejemplo de cómo el cargar con peso extra reduce la movilidad y afecta diversas funciones básicas.
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Cabe señalar que nutrición es el proceso que está íntimamente ligado a lo que comemos —a partir de que lo ingerimos, hasta el momento en que nuestro cuerpo absorbe sus nutrientes— pero lo mismo hay casos de sobrealimentación, que desnutrición crónica o asociados a la deficiencia de micronutrientes, por lo que cada caso se debe atender de manera particular.
Esto porque la alimentación, pero sobre todo la nutrición, permiten al organismo fortalecer el sistema óseo, mejorar la digestión, favorecer al sistema inmunológico, ayudar a los músculos, contribuir al cuidado de la vista, prolongar el ciclo de vida, evitar problemas cardiovasculares, reducir enfermedades neurológicas y prevenir afecciones psicológicas.
Complicaciones a la salud
Un ejemplo de las complicaciones derivadas del sobrepeso es el aumento en el riesgo de enfermedad renal, padecimiento que afecta aproximadamente a 11 millones de mexicanos, advierte el doctor Sergio Hernández.
El especialista en nefrología indica que el exceso de peso corporal puede dañar los riñones de varias maneras porque puede elevar la presión arterial, reducir la cantidad de sangre que llega (a los riñones) y causar inflamación, lo que produce deterioro de la salud renal, lo cual genera un ciclo vicioso de la enfermedad y complicaciones adicionales”.
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Ente los síntomas que se asocian a esta condición está la fatiga persistente, hinchazón de piernas y tobillos debido a la retención de líquidos, aumento en la frecuencia de orinar, especialmente por la noche; presencia de espuma en la orina, dificultad para respirar, náuseas, pérdida del apetito y calambres musculares.
El nefrólogo alertó que los síntomas de las enfermedades renales pueden ser sutiles en sus etapas iniciales, pero se vuelven más evidentes a medida que la condición avanza y causa más daño al organismo.
Métodos
Carlos Zerrweck, bariatra y endocrinólogo, la psicóloga bariatra Yunuhén Juárez y la nutrióloga bariatra Gladys Güitrón, todos ellos del Centro Médico ABC Santa Fe, expusieron algunos de los mitos más frecuentes sobre esta pandemia silenciosa de la obesidad y sobrepeso.
La psicóloga Juárez recuerda que la primera barrera que la población enfrenta para atender este problema es el estigma mientras que la nutrióloga Güitrón recuerda que prevalece a cultura de las dietas, en las que es recurrente la idea de lograr perder peso de manera rápida, lo que eleva el riesgo de rebote o recuperación de peso inmediata.
Entre los esquemas recurrentes se encuentra el ayuno intermitente, dietas, remedios o medicamentos; no obstante, hay casos en que pueden poner en riesgo la salud y ocasionar problemas digestivos, ansiedad, arritmias, debilidad muscular, calambres, vómitos, fatiga, anemia, entre otros, por lo que exhortan a realizar un acompañamiento médico y no replicar esquemas.
Por su parte, Zerrweck explica que una de las opciones para combatir el sobrepeso y la obesidad es la cirugía bariátrica, la cual consta de diversos métodos avanzados como la banda o manga gástrica, el balón o el bypass.
Pero este tratamiento se debe realizar por parte de un equipo multidisciplinario y certificado para evitar poner en riesgo la salud, pues si bien no es una opción barata ni accesible a la mayoría de la población, recurrir a médicos sin la preparación adecuada resulta peligroso.
Este es un enfoque multidisciplinario que debe tener el respaldo de cirujanos bariatras, nutriólogos, psicólogos así como programas de actividad física.
A considerar
- La obesidad es una enfermedad crónica que no respeta clase social, género o edad.
- Los factores que provocan la acumulación de grasa corporal pueden ser los más variados posibles, desde dietas desequilibradas hasta problemas psicológicos o hereditarios.
- La obesidad se puede determinar calculando el Índice de Masa Corporal (IMC), cuya fórmula es bastante simple: divide tu peso (kg) entre tu estatura (m) al cuadrado (el número multiplicado por sí mismo).
