La mañana de este miércoles, Palacio Nacional amaneció blindado con vallas metálicas, previo a la marcha del 26 de abril por la conmemoración de la desaparición de los 43 normalistas de la Escuela Normal Rural Isidro Burgos de Ayotzinapa, Guerrero.
Las vallas de tres metros de altura fueron desplegadas en los accesos del circuito del Zócalo de la Ciudad de México; sin embargo también se instalaron en otras calles aledañas como Correo Mayor, Moneda y Corregidora.
El gobierno federal ha recurrido a la instalación de estas vallas en diferentes movilizaciones que se registran en la Ciudad de México, a fin de evitar que se realicen daños en edificios históricos, en este caso la sede presidencial.
Daños a Palacio Nacional, el antecedente de los normalistas de Ayotzinapa
El pasado 6 de marzo, normalistas de Ayotzinapa derribaron una puerta de Palacio Nacional, en el acceso a través de la calle de Moneda, después de utilizar una camioneta de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) en medio de una manifestación para exigir diálogo con el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO).
Además, buscaban que las autoridades del Ejército entreguen 800 folios pendientes para dar avance a las investigaciones sobre el caso Ayotzinapa.
Todo ocurrió al mismo tiempo que López Obrador ofrecía su conferencia mañanera en el Salón Tesorería de Palacio Nacional.
