Luego de que la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJCDMX) dio a conocer que los restos óseos hallados en un presunto crematorio clandestino en los límites entre las alcaldías Tláhuac e Iztapalapa corresponden a perros, la líder de las Madres Buscadoras de Sonora, Ceci Flores, quien reportó el lugar, puso en duda la versión de la institución capitalina.
De acuerdo con los dictámenes antropológicos exprés, realizados por un equipo científico de la Fiscalía, los fragmentos de huesos no son de humanos, sino de origen animal, lo que ha provocado cuestionamientos entre activistas y la opinión pública.
Ceci Flores ha insistido en que los hallazgos pertenecen a humanos, pues cuenta con la experiencia suficiente para determinarlo en primera instancia.
Al respecto, la mañana de este jueves “alabó” la eficiencia de la FGJ, que en solo un día obtuvo resultados de los restos óseos, mientras que ella lleva esperando más de un mes conclusiones sobre un cráneo para verificar si es de su hijo.
Aseguró que “buscará” que lo analicen en la Ciudad de México (CDMX) a fin de que el caso se resuelva en una hora o menos.
“Llevo un mes, 11 días y siete horas esperando que me digan si este cráneo que encontré es de mi hijo. Lo voy a traer a la CDMX porque aquí lo pueden resolver en menos de una hora”, expresó en su cuenta de X.
Además, indicó que “se les adelantó” y juró " que no es una lagartija”, en referencia a los resultados de los dictámenes de la Fiscalía que apuntaron a que los restos son de animales.
Pide retroexcavadora para seguir con trabajos
La activista Ceci Flores, momentos antes del informe de la Fiscalía capitalina, pidió a través de redes sociales una retroexcavadora para continuar con los trabajos en la zona del límite de las alcaldías Iztapalapa y Tláhuac.
“Amigos, seguimos rascando esta tierra en CDMX, si alguien pudiera prestarnos una retroexcavadora, haría milagros”.