El Banco de México (Banxico) informó que la inflación –o aumento general de precios en productos y servicios– alcanzará un nivel más alto de lo previsto, durante los próximos 18 meses.
Señaló que “las expectativas de la inflación general para el cierre de 2024 exhibieron un ajuste al alza”, lo cual obligó a la institución a subir la tasa de precios esperada para los próximo seis trimestres.
Para segundo trimestre de este año, contado de abril a junio, el Banxico subió su pronóstico de inflación de 4.4% a 4.6%; para el tercero y cuarto trimestre –que en conjunto abarca de julio a diciembre– la tasa subió de 4% a 4.4% y de 3.6% a 4%, respectivamente.
Mientras que en 2025, las expectativas inflacionarias subieron de 3.2% a 3.5% en primer trimestre; de 3.1% a 3.3% en el segundo y de 3.1 a 3.2% en el tercer trimestre del próximo año.
¿Como me afecta el aumento de la inflación esperada?
Para las personas y familias, el aumento en las tasas de inflación implica una nueva temporada de eventuales incrementos y costos altos en los alimentos, productos y servicios que consumen con regularidad.
Además que el escenario descrito por el Banxico abre la puerta a la pérdida de poder adquisitivo de los hogares y un mayor gasto para surtir la despensa, cuyo impacto o daño al bolsillo se extenderá hasta el cierre de junio de 2025.
De acuerdo con las trayectoria esperada de la inflación, el golpe más fuerte para el bolsillo por la eventual alza de precios ocurrirá en lo que resta de 2024, entre el pasado mes abril y diciembre próximo.
En tanto que para los primeros nueve meses del siguiente año, el nivel general de la inflación comenzará a descender de forma paulatina hasta 3.1% y, a pesar del cambio en las expectativas del INPC, el indicador llegará a su meta oficial 3% al cierre de 2025.
