A dos años del rescate de más de 100 felinos de la fundación Black Jaguar-White Tiger, la Asociación de Zoológicos, Criaderos y Acuarios de México (AZCARM) dio a conocer que aún no se ha detenido al culpable de este delito silvestre y que el Gobierno en ningún momento se ha acercado a ellos para ofrecerles apoyo, a pesar de que la asociación ha invertido 80 millones de pesos en la recuperación y bienestar de los felinos.
A través de un comunicado de prensa, Azcarm expuso que después de un largo y burocrático proceso proceso que la Dirección General de Vida Silvestre (DGVS) se empeñó en complicar, 125 animales (la mayoría felinos, algunos mones, papiones y coyotes), fueron trasladados a 15 instituciones zoológicas de la asociación, que “sin dudarlo, pusieron a disposición sus recursos materiales y humanos para rescatar los ejemplares que se encontraban en una situación inhumana”.
“Ya pasaron dos años, y más allá de que nuestras instituciones zoológicas hayan recibido durante estos 24 meses algún tipo de apoyo o por lo menos reconocimiento o agradecimiento por parte de las autoridades ambientales, es la fecha en que solo hemos recibido ataques infundados e inspecciones arbitrarias”, señaló Ernesto Zazueta, presidente de la asociación.
Siguen en custodia temporal
Zazueta dijo que después de 24 meses de lo ocurrido, la Dirección General de Vida Silvestre se ha negado a dar la posesión final de los animales, a pesar de que la custodia temporal se otorgó en diciembre de 2022.
Cabe recordar que, en abril de 2015, la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) registró un inmueble que funcionaba como Predio e Instalación que Maneja Vida Silvestre (PIMVS), nombrado Gran Santuario Mexicano Jaguar Negro-Tigres Blanco.
El 4 de julio de 2022, la asociación denunció ante la Fiscalía General de la República (FGR) a Eduardo Serio, fundador del Santuario, por abandono y maltrato animal de felinos, entre los cuales se encontraban especies en peligro de extinción.
“Es lamentable que varios vivirán con daños hepáticos, fracturas en piezas dentales, colas mutiladas, debilidad visual y con problemas digestivos por la severa desnutrición y deshidratación que sufrieron. No obstante, estamos muy orgullosos y contentos de que la gran mayoría de los ejemplares no solo se encuentran bien de salud, sino que su comportamiento es muy favorable”, indicó la asociación.