Ante el inicio de los trabajos de rehabilitación en la Alameda Central, los comerciantes que se encontraban a lo largo del parque público se mudaron a las jardineras del Palacio de Bellas Artes, en donde ofertan varios productos, especialmente refrescos preparados, comida rápida, elotes y esquites, frente a la mirada de las autoridades, que vigilan toda la Avenida Juárez.
En un recorrido hecho por Publimetro, se pudo constatar que varios de los vendedores ambulantes –también conocidos como toreros– son de ascendencia venezolana, quienes han aumentando su presencia de venta en la capital, como en Metro Revolución, donde tienen su pasillo exclusivo para vender arepas y cachapas, comida tradicional del país sudamericano.
La presencia de elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) es notoria; mediante escudos impiden que los comerciantes vuelvan a bloquear las vialidades, pues en días pasados cerraron Avenida Juárez para solicitar al Gobierno capitalino que fueran reubicados en otro lugar, para también evitar las extorsiones que les imponen grupos delictivos.
En la zona resguardada, conviven alrededor de 30 comerciantes, entre los que se encuentran los indígenas mazahuas, colectivos feministas, venezolanos y los comerciantes que tienen más de 15 años vendiendo en la Alameda Central, quienes no fueron notificados por las autoridades sobre el proyecto, y si es que serán reubicados en otro lugar ante la inseguridad por riñas.
Y es que desde el pasado 22 de julio, la Alameda Central fue blindada por la Secretaría de Obras y Servicios (Sobse) para realizar trabajos de conservación, que incluyen la restitución de 300 metros cuadrados de piso de mármol, la colocación de 272 metros de tubería para arriates en jardineras y la preservación de las 12 fuentes y de 575 luminarias.
Las vallas de más de dos metros de alto, están ubicadas a lo largo de Avenida Juárez, pasando por toda la Alameda Central, en la que se encuentra el Hemiciclo a Juárez, zona en la que se documentó que impera la presencia de toreros, que son cuidados por sujetos con radios, quienes les avisan sobre posibles operativos de la Secretaría de Gobierno (Secgob).
Al ser cuestionado sobre si el proyecto de rehabilitación tiene el objetivo de remover a los vendedores ambulantes de la Alameda Central, el jefe de Gobierno, Martí Batres, aseguró que las obras servirán de “recomposición social, porque siempre ligamos lo físico con lo social”, así dejó entrever que la reubicación es algo que conlleva el proyecto.
“Hay labor que realiza la Secretaría de Gobierno, sobre todo, de diálogo con todos los grupos, con las diversas organizaciones, se plantean alternativas, también en este caso se va a hablar con todos; y hay una labor también que se realiza para que ciertas zonas queden libres, es decir, son tareas de reordenamiento que se están realizando permanentemente”, explicó.
Inseguridad
La inseguridad ha incrementado durante los últimos años en la Alameda Central, las extorsiones son el pan de cada día en la zona por la que transitan miles de personas. El 14 de julio pasado, elementos de la SSC detuvieron a tres hombres, entre ellos dos menores de edad, por agredir a balazos a dos personas en la inmediaciones de la Alameda Central.
Se trata de un sujeto identificado como Brandon Axel Díaz Chavarría, de 25 años, así como dos menores de edad, quienes presuntamente son integrantes de Los Palillos, célula delictiva dedicada a la extorsión a comerciantes en las inmediaciones de la Alameda Central.
Los tres individuos fueron capturados en seguimiento a los hechos en los que dos hombres fueron agredidos por disparos de arma de fuego en la calle Dolores y avenida Juárez, en la colonia Centro, donde uno de los cuales perdió la vida.
Otra renovación
El ex jefe de Gobierno, Marcelo Ebrard, ya había llevado a cabo una rehabilitación de la Alameda Central en el año 2012. En ese tiempo el parque fue renovado en su totalidad tras las quejas sobre inseguridad, proliferación de personas en situación de calle, falta de iluminación e incluso falta de salubridad debido a la presencia de sanitarios en mal estado.
Al principio, implicó la rehabilitación completa del espacio, restauración de esculturas, jardines, colocación de luminarias y de fuentes danzantes, que son muy visitadas en épocas de calor, donde –especialmente– los niños se mojan para combatir los rayos del sol.
