En las redes sociales, los internautas mantienen la discusión sobre la presencia de personas heterosexuales dentro de los espacios nocturnos dedicados exclusivamente a la comunidad LGBT+. Diferentes situaciones en los bares y espacios exclusivos se presentan diariamente y generan preocupación por la posible homofobia o violencia de género en estos escenarios.
Conflictos entre heterosexuales y comunidad LGBT+ en los bares
Las opiniones se dividen dependiendo de los beneficios o las amenazas entre las personas asistentes. Por ejemplo, mujeres comentan que asisten a los antro gay debido a que ahí reciben menos acoso, lo cual genera interés en los hombres para asistir a esos lugares. Sin embargo, la comunidad LGBT+ se contrapone debido a que los espacios exclusivos son reducidos, a diferencia de los miles de espacios ya existentes para la recreación entre heterosexuales.
Los acercamientos generados entre ambas poblaciones, heterosexuales y homosexuales, dentro de estos espacios nocturnos generan rechazo y hasta violencia de género. Por ejemplo, las confusiones también se generan en el acceso a los baños binarios, donde las mujeres rechazan la entrada de las mujeres trans. Estas diferencias también existen entre hombres y gays, quienes han sido golpeados al confundir a los hombres heterosexuales como parte de la comunidad.
Sin embargo, otros cuestionan los límites de la “no discriminación”, ya que los espacios nocturnos, en su propósito de ser inclusivos, mantienen la entrada a personas heterosexuales o identificadas como cisgénero, lo cual genera incomodidades y hasta conflictos. Por lo tanto, los límites establecidos detienen los prejuicios en contra de la la comunidad LGBT.
Personas de la misma comunidad incluyen a los heterosexuales aceptan la apertura con el fin de desempeñar un ejemplo de inclusión. Este argumento cuestiona la inclusión y el exclusivismo de estos espacios. El debate en redes sociales continúa mientra estas situaciones ocurren en estos establecimientos días con día.
