La maldición de las deudas impagables en la tarjeta de crédito es un fantasma que persigue a ocho de cada 10 usuarios de servicios financieros, quienes de acuerdo con la Condusef pierden el rastro de sus compras y gastos.
José Antonio Murillo, director general de RappiCard –tarjeta expedida por Rappi y el Grupo Financiero Banorte– señaló que la administración de las cuentas por pagar en los plásticos bancarios no solo mejora el historial crediticio, sino que también facilita el acceso a mejores oportunidades financieras.
“Contar con un historial crediticio saludable es fundamental para obtener préstamos más grandes, como una hipoteca, financiamiento para un auto, capital para un negocio o proyecto empresarial. Además, te puede ayudar a enfrentar imprevistos financieros”, dijo.
¿Qués es el crédito?
El directivo señaló que el primer paso para controlar y evitar la maldición de las deudas impagables está saber qué es el crédito. Explicó que el crédito es una herramienta clave en la vida financiera, que te permite comprar las cosas que necesitas o quieres sin tener que pagarlas de inmediato, con el deber o compromiso de liquidarlas a tiempo.
Refirió que todos deben saber que una tarjeta de crédito no solo es un medio de pago, sino un financiamiento de corto o mediano plazo. “Descártala como una extensión de tus ingresos o salario. Ten en mente que invariablemente deberás pagarla, el total o una parte, cada mes”, dijo.
Consejos para controlar tu tarjeta
Para mantener el control de tus gastos y deudas en la tarjeta de crédito, José Antonio Murillo te recomienda:
1. Evita que tu deuda en la tarjeta se haga de largo plazo
Puedes incorporarte al club de los “totaleros”, que son aquellos que en la “fecha límite de pago”, o si es posible antes, liquidan el 100% del “saldo para no generar intereses”.
Si no puedes, paga lo que esté a tu alcance. Si abonas solo el mínimo cubrirás una parte muy pequeña de tu deuda, en general solo estarás cubriendo intereses y tu adeudo se incrementará y podrá convertirse en una obligación de largo plazo.
Esto implica que debes conocer claramente el monto en pesos de tus ingresos totales que puedes destinar al pago de la tarjeta.
2. Define qué gastos cubrirás con la tarjeta
Evita financiar el gasto básico o esencial. No conviertas en deuda el pago de la leche, verduras, la luz y otros servicios periódicos pequeños, como las plataformas de streaming.
Preferentemente, destina tu crédito a la compra de bienes de larga vida, como electrodomésticos, muebles o servicios que no son comunes como vuelos, vacaciones, entre otros.
3. No uses tu tarjeta para pagar otra deuda.
Ten presente tu fecha de pago y realízalo oportunamente. Recuerda que liquidar después del plazo puede generar comisiones que se sumarán a tu deuda.
4. Aprende a elegir: ¿meses sin intereses o pagos diferidos?
Siempre que puedas, usa los meses sin intereses. Idealmente utiliza la opción de pagar a meses para adquirir bienes o servicios que no puedes pagar de inmediato en efectivo, generalmente aquellos de mayor valor.
Verifica que la suma de las mensualidades esté alineada con el monto que tienes destinado para el pago de deudas. No te sobrepases, porque de no cubrir la mensualidad se convierte en un adeudo revolvente que genera intereses.
Para mantener saludable el saldo de tu tarjeta de crédito registra tus gastos, así evitarás perder el control y mantener tus finanzas en orden.
¿Cómo sabes si estás manteniendo un crédito saludable?
Consulta tu score crediticio. Este es una puntuación que refleja tu historial crediticio y es utilizado por los bancos para determinar si eres un buen candidato para un crédito. Mientras mejor sea tu calificación, tendrás tasas más competitivas y ahorrarás en intereses.