El presidente de la Mesa Directiva del Senado de la República, Gerardo Fernández Noroña, aseguró que no presentarán denuncias por los daños ocasionados por la irrupción violenta de manifestantes a las instalaciones de la Cámara Alta, durante la discusión de la reforma al Poder Judicial, a pesar de que no es un asunto menor, porque fue un intento de “golpe al Poder Legislativo”.
En entrevista, Fernández Noroña lamentó que no se haya respetado el acuerdo entre él y Patricia Aguayo Bernal, representante de los trabajadores inconformes con la reforma judicial, por el cual se comprometió a permitir el trabajo de las y los legisladores en el recinto de Reforma e Insurgentes.
Mencionó que la oposición debe responsabilizarse de los sucesos violentos, porque tienen “personajes muy fuertes” y, a veces, en lo que consideran conveniente para su causa, no advierte el escenario que se puede presentar y el propio daño que pudieran hacer su grupo parlamentario.
“La oposición debe hacerse responsable, porque estaban festinando y celebran con los inconformes la toma violenta del recinto y eso me parece muy grave”.
— Gerardo Fernández
Solo fueron daños materiales
Al ser cuestionado sobre el saldo que dejó la entrada de los manifestantes al recinto legislativo, el senador indicó que más allá de los daños materiales que no fueron graves, lo lamentable es que hubo dos personas lesionadas, un policía y un elemento de Resguardo Parlamentario.
Sin embargo, Gerardo Fernández Noroña consideró que este asunto no debe dejar pasar, por lo que emitirá un enérgico reclamo.
El martes 10 de septiembre, los trabajadores judiciales dieron un portazo en las instalaciones del Senado de la República, ingresaron a pocos metros de las y los legisladores, portando banderas de México y gritando consignas como “el Poder Judicial no va a caer, no va a caer”, así como “y dónde están los senadores que nos iban a escuchar” tomaron parte de las instalaciones. Lo que ocasionó que los senadores cambiaran de sede para aprobar la Reforma del Poder Judicial.