De acuerdo con especialistas en sismologia la probabilidad de que ocurra un sismo superior al ultimo registrado es menor del 6% en los próximos tres días. Durante la madrugada y mañana del jueves 26 de septiembre, la Ciudad de México registró seis microsismos, según informó el Servicio Sismológico Nacional (SSN). Los movimientos telúricos, aunque de baja magnitud, despertaron a numerosos habitantes de la capital.
El primer sismo ocurrió alrededor de las 00:39 horas, seguido de otro a las 05:13. Posteriormente, se registraron cuatro microsismos adicionales a las 05:21, 05:31, 05:39 y 10:26 de la mañana. Los epicentros de los seis temblores se localizaron al sureste de la alcaldía Miguel Hidalgo.
¿Dónde fue el epicentro de los microsismos y su magnitud?
Las magnitudes de los microsismos oscilaron entre 1.0 y 2.5. El primero tuvo una magnitud de 2.5, mientras que los siguientes fueron de 2.0, 1.0, 1.5 y el último de 2.4.
A pesar de que no se activó la alerta sísmica, algunos habitantes reportaron haber sentido los movimientos en varias alcaldías, como Álvaro Obregón, Benito Juárez, Cuauhtémoc y Miguel Hidalgo. Sin embargo, la Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil de la CDMX (SGIRPC) informó que no se han reportado daños estructurales ni personas lesionadas.
La titular de la SGIRPC, Myriam Vilma Arzúa, confirmó a través de su cuenta de X que, tras comunicarse con las unidades de gestión de riesgos, no se han registrado incidentes. A pesar de la tranquilidad oficial, los microsismos generaron inquietud entre algunos habitantes de la capital.
De acuerdo con César Cabrera, investigador independiente en Ciencias de la Tierra y monitoreo de microsismos en el Valle de México los microsismos se debe a la inestabilidad local de estrés de un segmento de falla inferidad (no cartografiada) denominada como Minas de Cristo (río Becerra) que recorre desde el pide de monte de la Sierra de las Cruces a la zona lacustre de la Ciudad de México.
Las autoridades sismológicas, como el Servicio Sismológico Nacional (SSN) en México, monitorean constantemente la actividad sísmica, pero aún no existe una metodología confiable para predecir con precisión eventos sísmicos futuros. Ante cualquier posibilidad, es importante estar preparados, seguir las indicaciones de protección civil y mantenerse informado a través de fuentes oficiales.
