La Ley de Condóminos o de Propiedad en Condominios es un documento clave que define los conceptos básicos, las reglas de convivencia y procedimientos para la administración y solución de conflictos o controversias entre los dueños de una propiedad.
Los especialistas las definen como un conjunto de normas que regulan la convivencia, seguridad y mantenimiento de conjuntos habitacionales; así como el derecho exclusivo de los propietarios sobre su casa o departamento y la copropiedad de las áreas comunes.
El sitio especializado Gpvivienda.com puntualizó que –en términos prácticos– la Ley de Condóminos tiene objetivo “regular la constitucionalidad, modificación, organización, administración, funcionabilidad y formas de regir de las propiedades en condominio residenciales y habitacionales”.
Refirió que tales conceptos también incluyen las relaciones entre los administradores, propietarios e inquilinos; así como las bases para la convivencia pacífica en los conjuntos residenciales y los mecanismos para solución de conflictos o controversias que pueden presentarse.
“La Ley de Condóminos establece que un condominio es un inmueble cuya propiedad pertenece a varias personas, no obstante cada uno de ellos tiene derecho exclusivo sobre su casa o departamento, además del derecho de copropiedad sobre las áreas comunes”.
— Especialistas
Puntos clave de la Ley de Condóminos
En México la Ley de condóminos fue creada para cuidar los derechos de propietarios e inquilinos de los conjuntos residenciales. Y en cada uno de los estados del país existen regulaciones que se asemejan y se rigen por la Ley de Propiedad en Condominios.
Apuntó que en tal contexto, la legislación establece los siguientes puntos clave:
- Cada uno de los condominios deberá respetar las estaciones habitaciones –departamentos y casas– y las unidades de propiedad individual.
- Los propietarios e inquilinos pueden participar, votar y decidir cuáles son las acciones generales en las asambleas que velarán por la seguridad, calidad y mantenimiento del inmueble.
- También determina las reglas del uso de áreas comunes, para mantener la tranquilidad de todos los habitantes.
- Señala que toda persona que sea elegida como administrador debe ser retribuida por realizar ese trabajo.
- Cualquier propietario puede realizar la solicitud de información sobre los fondos de mantenimientos, estados de cuenta, administración y reservas para cuidar de los recursos del condominio.
- Si se produce la violación de las reglas de convivencia del condominio o de la administración, se pueden denunciar los hechos ante las autoridades.
Obligaciones del condómino
De acuerdo con la ley, los dueños de los departamentos o casas tiene la responsabilidad de:
- Pagar cuotas de mantenimiento establecidas en el tiempo y forma acordado por la administración del condominio; con este aporte obligatorio se pagan los servicios, reparaciones y se logran conversar las áreas comunes de fraccionamiento o edificio.
- Cumplir con las penalizaciones por mora. Los retrasos en el abono de la cuota tendrán un cargo extra. Este porcentaje por retraso se establece en el reglamento del condominio.
- Dicta que al menos 20% de los habitantes –tanto propietarios como inquilinos– deben acudir a las asambleas para tomar decisiones que competen al condominio.
- La propiedad individual es responsabilidad de cada inquilino y propietarios. Si se presentan daños en la casa o departamentos y, estos afectan a terceros, la administración no se hará responsable.
- Respetar y cuidar los espacios comunes y amenidades para mantener el orden y la paz en la comunidad.
- Todos, propietarios y habitantes tienen la obligación de respetar las normas establecidas.
¿Por qué es importante conocer la Ley de Condóminos?
- Con la ley de condominios es posible establecer las reglas, obligaciones, derechos y deberes que lograran mantener una convivencia estable y de calidad.
- Cada condominio dónde conviven un número variado de familias, necesita de reglas para funcionar correctamente.
- Su importancia reside en que es documento regulador de los condominios y establece los elementos básicos para la sana convivencia de los habitantes de edificios y fraccionamientos.