El paso del huracán John por Guerrero no solo dejó daños materiales, sino también que a varias personas les arrancó parte de su historia familiar, como fue el caso de Tanja Rodríguez, pues el hotel Mesón Casa de Piedra, que su padre construyó a lo largo de varios años, quedó como un montón de escombros.
Para ponerlo de nuevo en operación, por medio de las donaciones, espera conseguir 200 mil pesos para que el hotel abra de nuevo sus puertas.
“Este 23 de septiembre, el huracán destruyó por completo el trabajo arduo de años dentro de pocas horas, dejando el pueblo y el sustento de muchas familias destrozado. De todos, no es sólo un negocio, es la vida entera, es esfuerzo, amor y resiliencia”, relató.
Al igual que ella Paula Celina García, busca fondos para reconstruir Pepe’s Club, restaurante en Acapulco que no resistió el impacto del ciclón, el cual también tuvo afectaciones en sus cimientos, mobiliario, además de afectar el ingreso económico de los trabajadores.
“Cada donación cuenta y estaremos eternamente agradecidos por la generosidad. Juntos, podemos superar este desafío y seguir siendo un lugar de encuentro y disfrute para nuestra comunidad”, explica Paula Celina, que busca reunir 500 mil pesos.
Ayudar a los que no tienen voz
Los habitantes de Acapulco no solo buscan reponer su patrimonio, también se han dedicado a ayudar a los animales que resultaron afectados por el paso del huracán, ejemplo de esto es la recaudación que inició Jamilet Méndez para ayudar a perros y gatos callejeros que necesitan atención veterinaria urgente.
En sólo tres días pudo reunir casi 10 mil pesos para que el hospital Pet Health consiguiera insumos médicos, alimentos y pueda continuar con la ejecución de operaciones de emergencia.
César Arroyo, biólogo y representante de GroBios, organización civil dedicada a la conservación ambiental y protección de la fauna silvestre, desde el año pasado participó en la reconstrucción de campos tortugueros cuando el huracán Otis desató su furia en el destino turístico, por lo que esta vez no fue la excepción.
“He dedicado mi vida a la conservación de nuestra biodiversidad, de primera mano vi el impacto devastador que los desastres naturales tienen en las especies vulnerables y en las comunidades locales”, cuenta César.
Desde la CDMX, la agencia ecoturística Xahamar, organizó una recaudación de fondos para los campamentos tortugueros en Playa Encantada, Playa Ventura, Llano de la Barra y Marquelia, así como al refugio canino Cáritas Animal Costa Chica que cuida a más de 100 animales rescatados del maltrato.
“Para muchos de nosotros, los campos tortugueros son un segundo hogar. Nos reciben siempre con los brazos abiertos, nos permiten disfrutar de la naturaleza y nos regalan la maravillosa oportunidad de liberar tortugas marinas al mar. Ver cómo sus instalaciones han sido devastadas nos duele profundamente, pero así como nos han recibido, ahora es nuestro turno de estar para ellos”, narró Carlos Ramírez.
En este caso, el objetivo de la colecta es reunir 45 mil pesos antes del 15 de octubre para comprar impermeables industriales, herramientas, cascos, fuentes de poder, motosierras, cuerdas, lonas, despensas, croquetas, mallas, medicamentos y otros materiales para la reconstrucción.
Concentración de recaudación
Todas estos financiamientos solidarios se han realizado en la plataforma GoFundMe, la cual creó una página especial para concentrar las iniciativas en apoyo a quienes busca salir de la emergencia, con la seguridad que son peticiones legítimas y se garantiza la protección de los donantes.
“En sólo unos días, estas colectas en conjunto ya suman más de 60 donaciones solidarias que representan un rayo de esperanza para recuperar la vida en las zonas afectadas. Cualquier persona puede colaborar con aportaciones desde sólo 100 pesos, pero también compartiendo estas historias con sus seres queridos para que más personas participen”.
