La diputada de Movimiento Ciudadano, Ivonne Ortega Pacheco, ha propuesto una reforma al artículo 80 de la Constitución Política de México para incluir la denominación “Presidenta” como depositaria del Poder Ejecutivo Federal, en un esfuerzo por integrar la perspectiva de género en la Carta Magna. El documento fue turnado a la Comisión de Puntos Constitucionales para su dictamen.
En la exposición de motivos, Ortega Pacheco subraya que desde 1953, cuando se reconoció el voto femenino, hasta 2018, solo siete mujeres han encabezado el Poder Ejecutivo en sus respectivos estados. Desde entonces, la cifra ha aumentado a nueve. La diputada argumenta que aunque la lucha por los derechos de las mujeres ha alcanzado algunas metas, aún es necesario seguir impulsando la paridad de género, que hoy se considera un derecho fundamental.
La iniciativa destaca que, gracias a esta paridad, en las elecciones de 2023 hubo candidatas con amplias posibilidades de acceder a la Presidencia de la República, lo que contrasta con décadas anteriores, cuando las aspirantes no lograban avances significativos.
Aumentar la participación femenina
Sin embargo, Ortega Pacheco señala que 18 estados, entre ellos Baja California Sur, Coahuila, Chiapas, y Jalisco, no han tenido aún una mujer gobernadora, lo que evidencia la necesidad de implementar más acciones para garantizar la igualdad de género en el ámbito político. En este sentido, la propuesta busca modificar no solo el papel tradicional del hombre y la mujer en la sociedad y la familia, sino también aumentar la participación femenina en la toma de decisiones políticas.
La reforma también señala que la Constitución de 1917 no reconoció los derechos políticos de las mujeres, lo que reflejó su invisibilidad y exclusión en la vida política del país. Fue hasta 1953 cuando se les otorgó el derecho a votar y ser votadas.
Por ello, la propuesta considera que es crucial modificar el lenguaje del capítulo III, referente al Poder Ejecutivo, del artículo 80 de la Constitución, para generar igualdad sustantiva y acciones afirmativas que reconozcan las luchas históricas de las mujeres.
En consecuencia, se sugiere que el texto constitucional se ajuste para que el ejercicio del Supremo Poder Ejecutivo se deposite en “una sola persona”, quien podrá ser designada como “Presidenta” o “Presidente” de los Estados Unidos Mexicanos.
