Autoridades capitalinas, en conjunto con la Alcaldía de Tlalpan, recuperaron 3 hectáreas de suelo de conservación en el kilómetro 7.2 de la Carretera Picacho-Ajusco, tras detectar invasiones y construcciones ilegales en terrenos protegidos. El operativo fue coordinado por la Fiscalía de Investigación de Delitos Ambientales y en Materia de Protección Urbana (FIDAMPU), en respuesta a denuncias ciudadanas.
Durante la intervención se demolieron tres construcciones irregulares y se aseguraron 20 mil metros cuadrados de terreno, loteados de forma ilícita. Esta zona, clasificada como suelo de conservación según el Programa Delegacional de Desarrollo Urbano 2010, es crucial para la recarga de mantos acuíferos y la preservación de la biodiversidad en la región.
El operativo forma parte de las acciones conjuntas entre el Gobierno de la Ciudad de México y la Alcaldía de Tlalpan para detener la proliferación de asentamientos irregulares. La Secretaría del Medio Ambiente, encabezada por Julia Álvarez Icaza, subrayó que estos esfuerzos fortalecen la política de cero tolerancia hacia las invasiones en zonas protegidas. “No permitiremos que continúen las ocupaciones ilegales que ponen en riesgo los recursos naturales de la ciudad”, afirmó.
Por su parte, la alcaldesa Gaby Osorio destacó la importancia de estos terrenos para la capital. “El 80% de Tlalpan es suelo de conservación, y seguiremos trabajando para protegerlo. Esta acción demuestra nuestro compromiso con el medio ambiente y el bienestar de los capitalinos”, declaró Osorio.
Osorio añadió que estos operativos son fundamentales para preservar las áreas naturales que aportan múltiples beneficios ambientales a la ciudad. “Tlalpan es el pulmón de la Ciudad de México, y cualquier invasión que ponga en peligro nuestros bosques afectará a toda la ciudad. No bajaremos la guardia y mantendremos una vigilancia constante para evitar futuras invasiones”, aseguró la alcaldesa.
Las denuncias ciudadanas, presentadas el pasado 20 de octubre, fueron clave para activar el operativo, que evitó que se consolidaran más invasiones en la zona. Las autoridades se mantendrán vigilantes para asegurar que no se repitan ocupaciones ilegales en suelos de conservación.
