El 12 de diciembre de 1994, Jacobo Grinberg, un brillante neurofisiólogo mexicano conocido como el “Einstein mexicano”, desapareció sin dejar rastro. Su auto apareció estacionado en el aeropuerto de la Ciudad de México, pero jamás abordó un vuelo.
Sus documentos personales, incluyendo su pasaporte, permanecieron en su casa. Desde entonces, han pasado más de 30 años y el destino de Grinberg sigue siendo un misterio.
Cabe mencionar que Grinberg no era un científico común. Su trabajo en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) desafiaba las normas establecidas. Se especializaba en el estudio de los campos electromagnéticos del cerebro y su conexión con chamanes mexicanos.
De igual forma, en sus investigaciones documentó fenómenos extraordinarios, como cirugías sin instrumentos y la materialización de objetos, fenómenos que parecían desafiar las leyes de la física.
¿El gran descubrimiento?
Uno de sus descubrimientos más asombrosos fue la “Teoría Sintérgica”, que sugería que la realidad que percibimos no es más que una matriz creada por nuestra mente. Un concepto que, curiosamente, cinco años después inspiraría la famosa película Matrix. Esta teoría, que insinuaba que la consciencia humana podría acceder a otras dimensiones de la realidad, se convirtió en un foco de interés para diversas agencias, incluida la CIA.
En la UNAM, logró que niños leyeran con los ojos vendados, describiendo colores, objetos y hasta idiomas, todo sin haber visto nunca los objetos. Sus investigaciones también llevaron a un sorprendente experimento: dos personas en habitaciones separadas experimentaban sensaciones físicas mutuas sin ninguna conexión física directa, un fenómeno con una probabilidad de coincidencia de 1 en un millón.
Sin embargo, el misterio más grande llegó días antes de su desaparición. Según los testimonios de quienes lo vieron por última vez, Grinberg estaba “extremadamente nervioso” y mencionó que sabía “demasiado”. En su oficina, documentos clave fueron misteriosamente eliminados, como si alguien quisiera borrar toda evidencia de su trabajo. Algunos sostienen que Grinberg había descubierto un acceso a dimensiones paralelas o, quizás, había revelado secretos tan peligrosos que su vida estaba en riesgo.
Lo más inquietante de todo es que en los años previos a su desaparición, otros cinco científicos que investigaban fenómenos paranormales y la consciencia también desaparecieron bajo circunstancias extrañas. ¿Coincidencia o hay algo más oscuro detrás de estos eventos?
¿Qué pasó con Jacobo Grinberg?
La teoría más aterradora es que Jacobo Grinberg fue silenciado para evitar que sus descubrimientos, que podrían haber reescrito nuestra comprensión de la realidad, fueran divulgados. Hoy, a 30 años después, su legado sigue vivo a través de más de 50 libros publicados, aunque muchos de ellos fueron retirados de circulación también, misteriosamente.
¿Fue una víctima de sus propios descubrimientos? ¿Logró, de alguna manera, cruzar a otra dimensión? O, quizás, ¿fue una víctima más de un sistema que no quiere que la verdad salga a la luz?