Más de un año después de los ataques del 7 de octubre, el Bundestag aprueba una resolución contra el antisemitismo.Ha supuesto un largo tira y afloja, pero, finalmente, el Bundestag ha aprobado por amplia mayoría una resolución para una mejor protección de la vida judía en Alemania. De esta manera, el Parlamento alemán (Bundestag) se pronuncia a favor de endurecer la lucha contra el antisemitismo.
La propuesta fue formulada conjuntamente por los grupos parlamentarios que hasta ahora formaban la coalición de gobierno (SPD, Verdes y FDP), junto con el principal grupo parlamentario de la oposición, el conformado por los partidos democristianos CDU/CSU.
Tan solo los diputados de los grupos Bündnis Sahra Wagenknecht (BSW) y La Izquierda no votaron a favor.
Tema pospuesto una y otra vez
La resolución llega poco antes de la conmemoración de la Reichspogromnacht, la Noche de los Pogromos, cuando atacantes nazis destruyeron sinagogas y tiendas judías, el 9 de noviembre de 1938. Hubo cientos de víctimas mortales.
Al mismo tiempo, la decisión del Bundestag se produce exactamente 13 meses después de los ataques terroristas de Hamás. Ya en las primeras semanas tras el ataque de esa organización radical islamista a Israel, los grupos parlamentarios del Bundestag anunciaron su intención de aprobar una resolución en este sentido, pero, durante mucho tiempo, nada ocurrió. Tras el 7 de octubre de 2023, el número de ataques, delitos y crímenes antijudíos en Alemania se disparó y siguen siendo más elevados que nunca.
Cuanto más se demoraba el Bundestag en aprobar la resolución, más arreciaban las críticas de académicos y organizaciones no gubernamentales. El borrador de la resolución estaba listo, pero voces críticas temían la retirada de la financiación a instituciones o proyectos que critiquen la política de Israel.
Además, no veían con buenos ojos la alineación del texto con la definición de antisemitismo que hace la Alianza Internacional para el Recuerdo del Holocausto (IHRA, por sus siglas en inglés).
Se trata de una definición que ha sido adoptada por 43 países, entre ellos Alemania, y cuenta con el apoyo de diversos organismos internacionales. Pero hay reiteradas acusaciones, incluso de voces académicamente reconocidas, de que confunde la crítica al Gobierno israelí con el antisemitismo.
En agosto de 2024, un grupo de unos 150 académicos, juristas y artistas judíos residentes en Alemania expresaron en una carta abierta su "profunda preocupación" por la resolución prevista. Su objeción es que, aunque el texto pretende "proteger la vida judía en Alemania", en realidad la pone en peligro al "asociar a todos los judíos con las acciones del Gobierno israelí, un notorio cliché antisemita".
"Nunca más es ahora"
Una veintena de oradores intervinieron en el debate, en su mayor parte basado en hechos objetivos. Tres o cuatro aludieron a los puntos críticos del texto, subrayaron su rechazo o pidieron mejoras.
"Nunca más es ahora", dijo Dirk Wiese (del partido socialdemócrata SPD). Es vergonzoso que hoy, "personas de fe judía se planteen abandonar Alemania". Por su parte, la política del partido democristiano bávaro CSU Andrea Lindholz advirtió que, quien venga a Alemania a vivir debe "aceptar tanto la vida judía como la responsabilidad por el derecho de existencia de Israel. Y si no lo hace, tiene que abandonar nuestro país".
No solo oradores de los partidos SPD y Los Verdes se opusieron a dar por hecho que el odio a los judíos ha llegado a Alemania como consecuencia de la inmigración. Cuando Beatrix von Storch (del partido de ultraderecha AfD) alegó que, sin "la apertura de fronteras de Merkel", en 2015, los judíos vivirían seguros en Alemania, Armin Laschet (del democristiano CDU) respondió que las sinagogas en Alemania "no solo estaban protegidas por la Policía desde 2015".
Además, Laschet argumentó que, en Alemania, hay antisemitismo de derechas y de izquierdas, de inmigrantes y de jóvenes alemanes que no tienen trasfondo migratorio, todo lo cual le parecía "escandaloso".
En cuanto a la situación en Oriente Medio y las acciones del Gobierno israelí, ningún orador fue tan claro como Gregor Gysi, del partido Die Linke (La Izquierda).
Gysi argumentó que el derecho a la existencia de Israel es razón de Estado en Alemania por buenas razones, pero dijo que "no hay un Israel seguro sin una Palestina segura y soberana". Para Gysi, criticar al Gobierno israelí "debe estar permitido y no tiene nada que ver con el antisemitismo".
"El actual Gobierno israelí de Netanyahu, claramente de derecha, no es, por desgracia, parte de la solución, sino parte del problema en el conflicto de Oriente Medio", prosiguió Gysi.
"Hoy no es el final de la discusión", subrayó, por su parte, el político del FDP Konstantin Kuhle, quien dijo esperar que la aprobación de la resolución suponga el "inicio de un amplio debate social".
(ms/cp)