En México se consumen 50 millones de tazas de café soluble al día, lo que beneficia a cafeticultores de Oaxaca, Guerrero, Puebla, Chiapas, y Veracruz, quienes producen tanto la variedad Arábica como Robusta, para crear la combinación que —a como dé lugar— despierta cada día a la población.
Por medio de programas especiales, una conocida compañía productora de alimentos consolida una iniciativa que ha impactado a más de 20 mil productores en las principales zonas cafetaleras del país.
“En México, los granos de café que se utilizan provienen de regiones productoras clave y son tanto Arábica como Robusta, permitiendo a la marca ofrecer una gama de productos que satisfacen diferentes gustos”
— Fernando César, vicepresidente de Cafés y Bebidas de Nestlé México
Esta diversidad de origen garantiza la creación de mezclas con perfiles sensoriales únicos, detalló el directivo.
La empresa explicó que no cuenta con productores directos, sino que trabaja de la mano con proveedores, quienes se encargan de preparar el café para ser tostado y transformarlo hasta llegar a la presentación de café soluble.
A través de Plan Nescafé, la compañía asegura que promueve la producción y el abasto sustentable de café, incluyendo la colaboración con los pequeños productores, brindándoles asistencia técnica y entregando plantas de café resistentes a enfermedades, entre otros apoyos.
Resalta que estas iniciativas han mejorado la productividad por hectárea e incrementado los ingresos de los cafeticultores, impulsando así el desarrollo económico y social de las zonas cafetaleras.
Por ejemplo, a través de las plántulas que se les entregan, los cafeticultores pueden generar hasta tres veces más ingresos por hectárea, además que pueden participar en programas de educación y emprendimiento, principalmente los jóvenes, con el objetivo de promover la continuidad del cultivo de café en México.
El vicepresidente de Cafés y Bebidas de Nestlé México aclara que el Plan acepta a todos los productores que voluntariamente tengan interés en incorporarse, aunque su participación está libre de convenios o condicionantes posteriores de venta, con lo que garantizan el desarrollo del sector agrícola en el campo y respetan la decisión de los productores de participar en el mercado abierto.
Impulso a biocombustibles
En entrevista, Fernando César compartió que la empresa se encuentra cerca de cumplir la meta de alcanzar un café que sea producido 100% de forma sostenible para 2025, lo cual incluye que, además de utilizar envases reciclables o reutilizables en su mayoría, también buscan ser un ejemplo en cuanto a la emisión de cero emisiones netas en un futuro, contribuyendo a combatir el cambio climático.
Al respecto, explica que su caldera de biomasa utiliza el bagazo —residuos o subproducto que se obtiene después de la extracción de sólidos de café— como combustible y, a partir de ahí, la caldera será capaz de generar el 70% del vapor que la compañía consume en sus procesos, es decir, tiene su propio biocombustible.
De esta manera, la empresa productora de alimentos destaca que no solo colabora con los caficultores para ayudarles a aumentar la eficiencia, cultivar más y mejor café en menos tierra y trabajar con sus comunidades para ayudar a reforestar las regiones afectadas, sino también contribuye a que el café tenga un impacto medioambiental positivo a lo largo de toda la cadena de valor.
¿Cómo se produce de café soluble?
Existen siete etapas principales en el proceso de elaboración del café soluble, de los cuales Nescafé interviene a partir del tueste del grano:
- Cultivo. Los cafetos empiezan su vida en un vivero, donde reciben cuidados hasta que están listos para ser trasplantados. Allí producirán cerezas de café durante muchos años.
- Cosecha. Una vez maduras, caficultores expertos se encargan de recoger las cerezas de café, que se procesan para desarrollar las características sensoriales de los granos de café que se extraen de ellas.
- Tueste. Posterior al secado, limpieza y clasificación de los granos de café, se realiza el tostado para desarrollar el sabor, la intensidad y el aroma del café soluble.
- Molienda. Después, los granos de café perfectamente tostados se muelen en un polvo grueso.
- Extracción. El polvo de café grueso se somete a un proceso de extracción para extraer el sabor, el aroma y el color del café.
- Secado: En este proceso se elimina la máxima cantidad de agua posible de la infusión para que se transforme en un polvo fino.
- Envasado: Una vez finalizados todos los pasos para preparar el café para su envasado, el polvo de café se introduce en frascos de café que son distribuidos a lo largo y ancho del país.