Un escándalo de corrupción en España ha comenzado a resonar en México debido a la relación que podría vincular al expresidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) con su homólogo español, Pedro Sánchez, a través de un proyecto ferroviario valuado en más de 15,000 millones de euros, y que es una de las obras insignia del gobierno mexicano.
El epicentro de esta controversia gira en torno a Víctor de Aldama, un empresario español implicado en el “caso Koldo”. Esta investigación, llevada a cabo por las autoridades españolas, busca esclarecer una presunta red de sobornos y pagos ilegales vinculados a contratos públicos, que habrían beneficiado a altos funcionarios del gobierno de Sánchez. De Aldama ha sido señalado como intermediario clave en estas operaciones.
¿Cuál es la relación que liga al expresidente de México?
El nexo entre México y España comenzó a gestarse en enero de 2019, cuando Pedro Sánchez realizó una visita oficial a México. Durante esta reunión, Sánchez y AMLO discutieron posibles colaboraciones bilaterales, entre ellas, un proyecto ferroviario estratégico para el desarrollo del sureste mexicano. Según reportes del medio Vozpópuli, Víctor de Aldama habría estado involucrado en conversaciones relacionadas con estos contratos.
De Aldama ha declarado ante autoridades españolas que su relación con Sánchez fue más cercana de lo que se ha reconocido públicamente. Incluso, el empresario asegura que Sánchez le solicitó personalmente una fotografía como agradecimiento por gestiones realizadas en México. Aunque esta declaración ha sido negada por el gobierno español, la imagen en cuestión ha avivado el debate político en ambos países.
El escándalo de corrupción que sacude a España
Uno de los puntos más críticos de esta trama es que De Aldama ha implicado a otras figuras destacadas del gobierno español, como el exministro José Luis Ábalos y su asesor Koldo García. Según las acusaciones, De Aldama habría pagado cientos de miles de euros para obtener favores relacionados con contratos. Esto ha provocado un terremoto político en España, con la oposición exigiendo explicaciones y cuestionando la transparencia del gobierno de Sánchez.
En México, el caso ha generado preocupación por la posible opacidad en la adjudicación de contratos internacionales. El proyecto ferroviario, considerado un pilar del gobierno de AMLO, ya había enfrentado críticas por su impacto ambiental y social. Ahora, las revelaciones de posibles actos de corrupción internacional añaden un nuevo capítulo a la polémica.
Aunque no existen pruebas directas que impliquen a López Obrador o su administración en las irregularidades denunciadas en España, las conexiones entre ambas naciones han levantado sospechas.
Niegan las acusaciones de De Aldama
Pedro Sánchez, por su parte, ha desmentido categóricamente las acusaciones y ha calificado las declaraciones de De Aldama como “infundadas”. En un comunicado oficial, el gobierno español aseguró que estas declaraciones forman parte de una estrategia para desviar la atención de las investigaciones que enfrentan varios empresarios, incluido De Aldama.
En España, el “caso Koldo” se encuentra en una fase inicial, pero ya ha implicado a figuras prominentes del gobierno. Según el medio Huffington Post España, De Aldama ha declarado haber entregado 600,000 euros a altos funcionarios españoles, lo que ha llevado a estos a negar las acusaciones y amenazar con acciones legales contra el empresario.