Ante la creciente problemática de la escasez de agua en el Estado de México, surge una iniciativa que busca instalar 2,500 sistemas de captación de agua pluvial para enfrentar este desafío. Estos sistemas permitirían recolectar y almacenar agua de lluvia, convirtiéndola en un recurso aprovechable para diversos usos, contribuyendo así a aliviar la presión hídrica en la región.
La captación de agua pluvial es una solución práctica y sostenible para mitigar la crisis hídrica. Según datos de la ONU, se estima que las sequías podrían duplicarse para 2050, afectando la disponibilidad y calidad del agua a nivel global. En este contexto, implementar sistemas de captación no solo asegura un mejor aprovechamiento del recurso, sino que también reduce la dependencia de fuentes convencionales de agua.
En el Estado de México, la situación hídrica es particularmente alarmante debido a factores como el cambio climático, la contaminación, la sobreexplotación de acuíferos y una gestión inadecuada de los recursos hídricos. La falta de infraestructura eficiente y educación ambiental complica aún más el acceso al agua, especialmente en comunidades rurales y marginadas.
Para abordar esta problemática, la propuesta contempla reformas a las leyes y códigos estatales que hagan obligatoria la instalación de sistemas de captación en escuelas públicas, edificios gubernamentales, viviendas y nuevas construcciones. Además, se prevé destinar recursos financieros y tecnológicos para garantizar su implementación efectiva, promoviendo soluciones sostenibles fabricadas con tecnología local, apunta José Alberto Couttolenc, líder del Partido Verde Ecologista de México (PVEM) en el Estado de México.
La instalación de captadores de agua pluvial representa múltiples beneficios, como la reducción del uso de agua potable en actividades no esenciales, el aprovechamiento de un recurso que a menudo se desperdicia y la mitigación de inundaciones en zonas urbanas durante lluvias intensas. A largo plazo, también fomenta una cultura de cuidado y aprovechamiento responsable del agua, esencial para enfrentar la crisis hídrica.
Beneficios de los captadores de agua pluvial en zonas urbanas y rurales
La instalación de estos sistemas ofrece múltiples beneficios:
Reducción de la dependencia de agua potable para usos no esenciales, como limpieza o riego.
Mitigación de inundaciones en zonas urbanas, al reducir el volumen de agua que fluye hacia el drenaje durante lluvias intensas.
Promoción de una cultura de aprovechamiento y cuidado del agua, que es fundamental para enfrentar la crisis hídrica.
Un esfuerzo conjunto para enfrentar la crisis hídrica
A partir de esta visión, diferentes actores han comenzado a trabajar en proyectos piloto que buscan evaluar la viabilidad y eficacia de los sistemas de captación de agua pluvial en distintas comunidades del Estado de México. Estas primeras etapas permitirán ajustar la propuesta y escalarla para que beneficie a más personas en el futuro.
“Sabemos que cuidar del agua es cuidar del futuro. Es momento de implementar soluciones reales para los problemas que enfrentamos todos los días”, subrayó Couttolenc.
La meta de instalar 2,500 captadores de agua pluvial responde no solo a una necesidad urgente, sino también a una visión estratégica de desarrollo sostenible. Estas acciones contribuirán a reducir la presión sobre los acuíferos, disminuir el impacto de las sequías y garantizar el acceso al agua para las generaciones futuras.