Los teatros, museos y orquestas de Alemania reciben financiación pública. Ahora, van a sufrir recortes presupuestarios. Las consecuencias no serán solo culturales, advierten expertos.Muchas personas estarán probablemente de acuerdo en que la cultura es algo importante en Alemania. Pero, si nos fijamos en lo que sucede en Berlín estos días, donde hay fuertes disputas sobre la financiación de teatros y orquestas, cines, danza y eventos literarios, nos asaltarán serias dudas al respecto: los presupuestos culturales se van a ver reducidos hasta un 12 por ciento.
Esto afecta tanto a los teatros establecidos y tradicionales, como a la escena independiente. La razón alegada es que el estado federado de Berlín tiene que ahorrar dinero. "La edad de oro de la cultura ha terminado", lamenta el Consejo Cultural Alemán, la organización que agrupa a las asociaciones culturales del país.
El panorama es el mismo por todas partes: municipios, distritos y estados federados atraviesan dificultades financieras. Tras el colapso de la coalición formada por los socialdemócratas del SPD, Los Verdes y el partido liberal FDP, el Gobierno federal no tiene presupuesto para 2025. Esta situación presagia tiempos inciertos para la cultura.
Menos dinero del Gobierno federal
Hasta hace poco, las cosas pintaban bien para la financiación cultural en Alemania. Según el Informe sobre Financiación Cultural 2022 de la Oficina Federal de Estadística, el gasto público en cultura sólo ha ido en una dirección en los últimos diez años: al alza. Pasó de 9.300 millones de euros en 2010 a 14.500 millones de euros en 2020, un aumento de nada menos que el 55,1 por ciento. Pero esos días han quedado atrás.
Ahora, los recortes golpean con distinta dureza a los sectores e instituciones culturales: la Berliner Schaubühne, por ejemplo, que es una sociedad anónima, teme declararse insolvente antes de 2025. El Berliner Ensemble se ve obligado a hacer recortes en la producción. La Volksbühne teme por su capacidad operativa, al igual que el teatro juvenil Grips, el teatro infantil y juvenil Theater an der Parkaue y el Deutsches Theater.
También están en la lista de recortes presupuestarios la Konzerthaus, los cines de Berlín y muchas otras instituciones culturales. El Senado también paraliza la remodelación en curso de la Komische Oper.
Pensamiento emprendedor
¿Perderá Berlín su atractivo internacional? Dorothea Gregor, experta en cultura de la Fundación Liz Mohn, cree que la situación económica y financiera y, en consecuencia, el descenso del gasto cultural, hacen que el panorama teatral y cultural alemán se enfrente a un "enorme cambio estructural".
Sin embargo, muchos teatros "dan demasiado por sentado que el dinero seguirá fluyendo como antes". Según Gregor, en este punto se necesita un pensamiento emprendedor, también para abrir nuevas oportunidades de financiación.
El valor del arte y la cultura
En cambio, Lutz Hillmann, director del Deutsch-Sorbisches Volkstheater de Bautzen, en Sajonia, y también presidente estatal de la Asociación Alemana de Teatros, se muestra algo perplejo ante el debate sobre los recortes en Berlín.
"¿Qué valor tienen el arte y la cultura?", se pregunta Hillmann. "Si los políticos deciden que la cultura no es tan importante en el contexto de todas las tareas del Gobierno federal, los estados, las ciudades y los municipios, entonces eso también tendrá un efecto..Los teatros y las orquestas, por ejemplo, ya no sólo cumplen las tareas tradicionales.
"Somos lugares de encuentro social, trabajamos con niños y jóvenes, salimos a la comunidad, establecemos redes". Al fin y al cabo, la oferta cultural es especialmente importante en las zonas rurales. "Si no tenemos esto en cuenta", advierte Hillmann, "tendremos resultados electorales aún más desastrosos, porque la gente estará cada vez más descontenta".
Discurso democrático
En la misma línea se pronuncia Olaf Zimmermann, director general del Consejo Cultural Alemán. "Ahora mismo, los espacios culturales son urgentemente necesarios para tratar temas de actualidad, ofrecer lugares para el discurso democrático, estimular la reflexión o, sencillamente, crear cohesión", escribe Zimmermann en el número actual deCultura y Política, la publicación de la asociación.
"Los recortes a las instituciones también repercutirán en la escena independiente y en las industrias culturales y creativas", lamenta Zummermann. Ya sea en Colonia o en Dresde, en muchos lugares existe la amenaza de recortes en el presupuesto cultural "que afectarán lo esencial", prosigue. Sin embargo, advierte, a pesar de lo ajustado de los presupuestos, los proyectos importantes no deben quedarse en el camino, como el canon mínimo para los artistas, la digitalización o la sostenibilidad del sector cultural.
(ms/rml)