En una reciente votación sobre la reforma constitucional para cambiar el término “presidente” por “presidenta” en México, la senadora del Partido Acción Nacional (PAN), Lilly Téllez, fue la única funcionaria que votó en contra de esta propuesta. Te contamos por qué está en contra.
¿Por qué Lilly Téllez no quiere cambiar el término presidente a presidenta?
Este cambio, promovido por la mandataria Claudia Sheinbaum, busca hacer un ajuste en el lenguaje para reflejar una mayor inclusión de las mujeres en la política y en los altos cargos del gobierno. Sin embargo, Lilly Téllez se ha mostrado en contra de esta propuesta; la senadora argumenta que este cambio en la Constitución es solo un “capricho” de la mandataria y que no es necesario modificar el término “presidente” para promover la igualdad de género.
En sus declaraciones, Téllez afirmó: “El mío fue el único voto en contra del capricho de la presidente, de establecer en la Constitución que le digan presidenta, con A. El idioma NO es enemigo de las mujeres, lo que daña a las mujeres es la mafiocracia de la narco-izquierda que preside Claudia la Secretaria”.
Para Téllez, el lenguaje no debe ser un factor determinante en la lucha por los derechos de las mujeres, y considera que el verdadero problema radica en las estructuras de poder y corrupción, no en la terminología.
La postura de Lilly Téllez ha generado una fuerte reacción en la opinión pública. Muchas mujeres han criticado su voto en contra, cuestionando la falta de sororidad que la senadora muestra al no respaldar un cambio que, a juicio de muchas, representa un paso hacia la inclusión de las mujeres.
Por otro lado, hay quienes apoyan su decisión, argumentando que el cambio de término no es esencial para la lucha feminista y que el enfoque debería estar en temas más profundos y estructurales, como la justicia social y económica para las mujeres.
¿Por qué Sheinbaum quiere que la llamen presidenta y no presidente?
Claudia Sheinbaum, tanto en su campaña presidencial como en su mandato, ha luchado por la inclusión y visibilidad de las mujeres en el ámbito político y social; uno de sus objetivos ha sido modificar el lenguaje institucional, pidiendo que se utilice el término “presidenta” con “a”, para así visibilizar a las mujeres que ocupan cargos de liderazgo.
Para Sheinbaum, este cambio lingüístico es un acto simbólico importante en la lucha contra la desigualdad de género, buscando que el lenguaje refleje con precisión la realidad de la participación femenina en la política y la sociedad.
Esto le respondió Sheinbaum a Lilly Téllez tras emitir voto negativo
Ante esta controversia, Claudia respondió a la postura de Téllez, asegurando que si no se adoptan estos cambios en el lenguaje, una parte importante de la población mexicana, especialmente las mujeres, se sentirían excluidas de los procesos políticos.
La mandataria reiteró que el lenguaje es una herramienta poderosa para la transformación social y que visibilizar a las mujeres a través de su nombramiento es un paso necesario hacia la igualdad de género.
Este debate continúa reflejando las tensiones entre diferentes visiones sobre cómo avanzar en la lucha por los derechos de las mujeres en México, y el papel del lenguaje en este proceso.