El presidente de Colombia, Gustavo Petro, se encuentra en México desde el 15 de diciembre, en el marco de una visita oficial para reunirse con la presidenta mexicana Claudia Sheinbaum en el Palacio Nacional de la Ciudad de México (CDMX). Durante su estancia, además del encuentro con su homóloga, aprovechó para visitar las instalaciones de la Embajada y el Consulado de Colombia en territorio mexicano, donde realizó algunas observaciones que derivaron en un anuncio importante.
¿Gustavo Petro quiere vender la casa del embajador colombiano en México?
Durante su recorrido, el mandatario colombiano notó que las residencias utilizadas por los embajadores de su país en México eran excesivamente ostentosas. Petro consideró que dichas propiedades no reflejaban un enfoque de servicio ciudadano, criticando la falta de espacio en las áreas destinadas a atender a los colombianos residentes en México.
Ante esta situación, el presidente anunció que ordenará la venta de estas propiedades de lujo para destinar los recursos obtenidos a mejorar las instalaciones consulares y ampliar los espacios de atención para los ciudadanos colombianos en el país.
“Esta es la residencia de quien ostente el cargo de embajador en México, mientras la embajada y consulado para atender a los colombianos no tiene espacio. Aquí se demuestra el carácter aristocrático y sin sentido de servicio a la ciudadanía en que transformaron a la cancillería por décadas. Ordenaré vender estas casas ostentosas que sirven de residencia, para ampliar los espacios de servicio a la ciudadanía”, señaló Petro durante su declaración.
¿Cuándo será la venta de residencias?
A pesar del anuncio, el presidente no ofreció detalles específicos sobre la fecha en la que se procederá a la venta de las residencias ni el precio que se establecerá para dichas propiedades.
Las instalaciones de la Embajada de Colombia están ubicadas en Avenida Paseo de la Reforma 412, piso 19, mientras que el Consulado General de Colombia se encuentra en Avenida Paseo de la Reforma 379, piso 1; ambas ubicaciones están en la alcaldía Cuauhtémoc de la Ciudad de México, las cuales se ven reducidas de espacio en comparación con la residencia del embajador colombiano.
Con esta medida, Gustavo Petro busca dar un giro en la política de manejo de la cancillería colombiana, priorizando el servicio a los ciudadanos sobre los lujos innecesarios en la representación diplomática. La venta de estas residencias reflejaría un cambio hacia una gestión más austera y enfocada en mejorar las condiciones de atención para los colombianos que residen en el extranjero.