Dos militares perdieron la vida al intentar desactivar una mina en Buenavista, Michoacán; 13 más resultaron heridos. Horas antes, otros dos elementos también murieron en circunstancias similares en Cotija, dejando un saldo de cinco heridos. En Publimetro México te contamos los detalles.
¿Qué pasó con las minas terrestres en Michoacán?
La tragedia más reciente ocurrió entre la noche del 17 y la madrugada del 18 de diciembre en la comunidad Paredes del Abogado, ubicada en el municipio de Buenavista. Según el medio Primera Plana MX, dos elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Defensa) fallecieron al intentar desactivar una mina terrestre colocada por presuntos miembros del crimen organizado; además, 13 militares resultaron heridos, cuatro de ellos en estado grave.
Las autoridades locales y la Fiscalía General del Estado (FGE) han iniciado una nueva investigación para esclarecer los hechos. Este incidente no es aislado, ya que ocurrió días después de un ataque similar en el municipio de Cotija, también en Michoacán; en este último caso, dos militares murieron mientras intentaban desactivar otro artefacto explosivo en una comunidad rural de la zona supuestamente en donde hay presencia del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
Difunden en redes videos de las explosiones de minas en Michoacán
Los hechos han generado gran preocupación debido al uso de minas terrestres, una táctica cada vez más común entre los grupos del crimen organizado en la región. De acuerdo con Ricardo Trevilla, titular de la Defensa, las minas son atribuidas a la organización criminal conocida como Cárteles Unidos, un grupo que ha estado en conflicto con otros cárteles por el control territorial en Michoacán.
Este uso de explosivos representa un grave riesgo no solo para las fuerzas de seguridad, sino también para la población civil que habita en las áreas afectadas por el conflicto.
El saldo trágico ha sido de cuatro militares muertos y 18 heridos. Las imágenes y videos de los hechos ya circulan en redes sociales, mostrando el impacto de los explosivos y la tensión que se vive en la región; estos ataques han generado un aumento en la presencia militar y de las fuerzas de seguridad en Michoacán, en un intento por recuperar el control en zonas dominadas por el crimen organizado.