El Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) suspendió este jueves los despegues y aterrizajes debido a la presencia de niebla en la capital del país. Esta medida, implementada por motivos de seguridad, busca proteger a los usuarios, tripulaciones y personal en tierra ante las complicaciones que genera este fenómeno meteorológico.
¿Qué es la niebla y cómo afecta las operaciones aéreas?
La niebla ocurre cuando la temperatura ambiente coincide con el punto de rocío, reduciendo significativamente la visibilidad. Cuando esta es inferior a 804 metros (medio millar), se considera riesgosa para las maniobras de aterrizaje y despegue, ya que:
- Los pilotos tienen dificultades para visualizar la pista
- Las luces de navegación de otros aviones o equipos en tierra pueden no ser detectadas
- Vehículos de servicio, como remolcadores y camiones, pierden visibilidad, lo que dificulta su movimiento seguro
¿Por qué se suspenden los vuelos en estas condiciones?
De acuerdo con Luis Aragón, gerente del Centro de Control Operativo del AICM, aunque el aeropuerto cuenta con sistemas de aterrizaje por instrumentos que permiten operar con baja visibilidad, la niebla extrema puede comprometer la seguridad de las operaciones. En estos casos, los controladores de tránsito aéreo, en conjunto con las autoridades aeronáuticas, optan por suspender los vuelos o redirigir los aviones a aeropuertos alternos.
Medidas de seguridad y recomendaciones
La suspensión de vuelos en el AICM es una medida preventiva diseñada para garantizar la seguridad de todos los involucrados. Durante estos eventos, se recomienda a los pasajeros:
- Mantenerse informados a través de las aerolíneas
- Revisar los avisos en tiempo real sobre la reanudación de vuelos
- Considerar tiempos adicionales en caso de reprogramaciones o desvíos
El AICM continuará monitoreando las condiciones climáticas y reanudará las operaciones en cuanto la visibilidad lo permita.