El inicio de enero trae consigo motivación para cumplir nuevos propósitos: inscribirse al gimnasio, agendar tratamientos estéticos o invertir en cursos de desarrollo personal. Sin embargo, este entusiasmo puede volverse un arma de doble filo, especialmente en medio de la cuesta de enero, al exponernos a fraudes que ponen en riesgo nuestros ahorros y estabilidad financiera.
Fátima Herrera, product manager de Klibu, advierte que esta época es propicia para que los estafadores se aprovechen de la vulnerabilidad emocional y financiera de las personas que buscan alcanzar sus metas.
A continuación, te presentamos los cinco fraudes más comunes al inicio del año y cómo identificarlos:
- Membresías de gimnasios fantasma: Es uno de los fraudes más frecuentes en esta temporada. Ofrecen promociones irresistibles en redes sociales, como descuentos del 50% si pagas la anualidad por adelantado. Tras realizar el pago, descubres que el gimnasio no existe o que, después de algunos meses de operación, desaparece sin previo aviso, dejando a los clientes sin servicio ni dinero.
- Depósitos para rentar propiedades que no existen: El inicio de año motiva a muchas personas a buscar un nuevo hogar. Los estafadores publican anuncios falsos de propiedades en zonas exclusivas a precios bajos. Solicitan un depósito para “apartarlas”, pero tras recibir el dinero, desaparecen sin dejar rastro.
- Ofertas estéticas fraudulentas: Desde blanqueamientos dentales a precios muy bajos hasta masajes exprés por menos de $300, estas promociones suelen ser demasiado buenas para ser reales. En algunos casos, los servicios son cancelados sin explicación, o peor, los procedimientos son realizados por personas sin capacitación, lo que puede poner en peligro tu salud.
- Préstamos rápidos con costos ocultos: La cuesta de enero impulsa a muchas personas a buscar préstamos rápidos. Los estafadores ofrecen condiciones atractivas como “sin aval ni papeleo”, pero solicitan pagos iniciales o comisiones por adelantado que nunca se recuperan.
- Cursos y certificaciones falsas: La motivación por superarse profesionalmente lleva a muchas personas a caer en ofertas de cursos “internacionales” o certificaciones rápidas a precios bajos. Tras realizar el pago, descubren que el curso carece de valor oficial o que el contenido es de pésima calidad.
¿Cómo protegerte de estos fraudes?
- Verifica la reputación de la empresa o persona que ofrece el servicio
- Investiga opiniones y referencias de otros usuarios
- Desconfía de precios excesivamente bajos o promociones que exijan pagos inmediatos
- Consulta directamente con instituciones oficiales sobre la validez de cursos y certificaciones
El inicio de año es una oportunidad para cumplir tus metas, pero siempre prioriza la seguridad y evita caer en estafas que puedan poner en riesgo tu bienestar financiero y personal.