Por desconocimiento o para economizar, el uso de cosméticos pirata registra un crecimiento acelerado en México, y ya representa hasta 30% de lo que se comercializa en el país, lo que afecta no solo a los industriales de la belleza, sino que también representa graves riesgos a la salud de las consumidoras, advierten especialistas.
Según datos de la Cámara Nacional de la Industria de Productos Cosméticos y del Cuidado del Hogar (CANIPEC), el mercado informal de cosméticos ya representa 30% del total, mientras que los productos pirata crecieron un 10% de 2022 a 2023.
Esta tendencia no solo afecta a la industria formal, sino que también representa un riesgo significativo para la salud de los consumidores, en su mayoría mujeres, quienes presentan desde irritación, reacciones alérgicas, manchas o hasta síndromes endocrinológicos por el uso de esteroides tópicos, explica la dermatocosmiatra Lu Arteaga.
Al respecto, la CANIPEC refiere que en 2022, el comercio informal representó el 30% de las ganancias totales generadas en la categoría de maquillaje de color, que alcanza un valor de 34 mil 456 millones de pesos.
De modo que los productos piratas, rellenados con sustancias que no cumplen los lineamientos de calidad o provienen de mercancía robada, generó unos 10 mil 200 millones de pesos.
Y mientras los productos de empresas serias y responsables pasan por procesos de análisis, investigación, innovación y transparencia en la información, a fin de garantizar que no serán un riesgo para el consumidor, las marcas pirata violan las leyes y normas oficiales del país.
No obstante, tres de cada diez productos de maquillaje vendidos en México se comercializan en el mercado informal, siendo los artículos más populares maquillaje, cremas faciales, productos para el cuidado del cabello y hasta perfumes, detalla la CANIPEC.
El atractivo de estos productos, reconoce la cámara, radica en su bajo costo y en el deseo aspiracional de los consumidores de adquirir artículos de marcas prestigiosas.
Sin embargo, estos productos no cumplen con los estándares de calidad ni contienen los ingredientes prometidos o autorizados por las autoridades sanitarias, es decir, la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), lo que los convierte en una opción peligrosa.
Regulación sanitaria de cosméticos
En el mercado formal, los cosméticos están sujetos a estrictas normativas y regulaciones y es la Cofepris el organismo encargado de supervisar la seguridad, calidad y eficacia de estos productos.
De hecho, existen diversas normas que vigilan al sector, como una que regula el etiquetado, en la que se señala que se debe incluir información clara y precisa sobre la composición, precauciones de uso, país de origen y otros datos relevantes, o la norma que valida las buenas prácticas de fabricación.
Según la reglamentación, en las etiquetas deben estar enlistados los ingredientes con una mayor concentración, mientras que aquellos con porcentaje menor a 1% pueden ser mencionados en orden aleatorio.
Asimismo, los productos que tengan una duración menor o igual a 24 meses deben ostentar en la etiqueta la fecha de caducidad, la cual indica hasta qué momento el producto puede seguir manteniendo sus características y función en condiciones normales de uso, un ejemplo de esto son los protectores solares.
Al respecto, CANIPEC resaltó que los cosméticos deben someterse a pruebas de seguridad para garantizar que no causen irritación, alergias u otros efectos adversos en la piel.
Y refirió que, de manera regular, organismos gubernamentales realizan inspecciones a las empresas fabricantes y distribuidoras de cosméticos para verificar el cumplimiento de las normas y retirar del mercado aquellos productos que representen un riesgo para la salud.
Pero eso no ocurre solo con los productos nacionales, sino que la importación de cosméticos también está sujeta a la regulación de la Cofepris, con el fin de que los productos cumplan con los mismos requisitos que los fabricados en México.
En paralelo, la Canipec —que engloba a las principales compañías productoras y distribuidoras de productos en el país— desarrolló el Código de Autorregulación y Ética Publicitaria de Productos Cosméticos (COSMEP), para fomentar una cultura de cumplimiento legal y ética, alineada a ofrecer al consumidor una publicidad veraz, sustentada y responsable, que promueva la inclusión y democratización sobre los productos de la industria.
¿Cuáles son los riesgos por el uso de cosméticos pirata?
Sobre los cosméticos y productos para la belleza irregulares, mejor conocidos como pirata, Lu Arteaga, dermatocosmiatra certificada, advierte que, a diferencia de los productos de marcas reconocidas, que pasan por rigurosas pruebas de calidad y seguridad, los cosméticos falsificados carecen de controles sanitarios.
“Podemos encontrar cientos de videos en internet que muestran la fabricación de estos productos en condiciones insalubres”
— Lu Arteaga, dermatocosmiatra
Explica que entre los efectos adversos del uso de maquillaje pirata se encuentran irritaciones, reacciones alérgicas severas, descamación, quemaduras epidérmicas y manchas en la piel.
En casos más graves, pueden contener sustancias como esteroides tópicos, que generan síndromes endocrinólogicos, pero además el uso de productos caducados o alterados en textura y olor también representa un riesgo.
Por ello, Arteaga enfatiza la importancia de adquirir productos de marcas que cumplan con los estándares de calidad y salubridad, y de consultar a especialistas antes de utilizar tratamientos tópicos.
