De acuerdo con el reporte de medios locales, varias empresas suspendieron operaciones en Acapulco tras una ola de violencia en contra de choferes, este jueves en el puerto, donde tres repartidores fueron baleados, de los cuales, dos murieron y uno resultó gravemente herido.
Según Proceso, la violencia criminal no da tregua en esta ciudad y en menos de 24 horas, seis personas fueron asesinadas y nueve más resultaron lesionadas en distintos ataques armados. La empresa FEMSA, que distribuye los diversos productos de la Coca-Cola, detuvo sus operaciones en cuatro instalaciones del puerto, después del asesinato de uno de sus empleados en la colonia Bellavista.
La serie de ataques se dieron de manera simultánea con agresiones contra trabajadores de otras compañías, como FUD, en la colonia Hogar Moderno, y la Cervecería Corona, cerca de la avenida Costera.
Cierran instalaciones y bodegas de reparto
Durante un recorrido por las instalaciones de Coca-Cola, realizado por la periodista local Fernanda Ramírez para Anews MX, se constató que las oficinas administrativas y la bodega en la avenida Cuauhtémoc permanecen cerradas, custodiadas únicamente por guardias de seguridad. De igual forma, las instalaciones frente al parque Papagayo lucen prácticamente vacías, con pocos vehículos en los estacionamientos y camiones de reparto inmovilizados.
Trabajadores confirmaron que las operaciones estarán suspendidas hasta nuevo aviso, debido al temor que generó el asesinato de su compañero. Las instalaciones afectadas incluyen las bodegas de Renacimiento, El Conchero y la planta de producción en El Cayaco.
Mientras tanto, empleados de Bonafont también reportaron una disminución en sus actividades. De acuerdo con testimonios, varias rutas de distribución dejaron de operar por miedo a nuevos ataques y sólo se realizan entregas en la zona Diamante y Coyuca de Benítez.