Curar el VIH será más difícil que curar el cáncer. Aparte de unos pocos casos "milagrosos", los antirretrovirales solo suprimen el VIH, no lo matan. Pero las nuevas investigaciones son prometedoras.El VIH o Virus de Inmunodeficiencia Humana es "como una bomba de tiempo", dice James Riley, microbiólogo de la Universidad de Pensilvania, en EE. UU. Incluso ahora, décadas después de que se identificara el virus y con los medicamentos antirretrovirales que nos permiten suprimirlo antes de que se desarrolle como Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida o SIDA, todavía hay 40 millones de personas que viven con la enfermedad. Los científicos siguen buscando una cura para el VIH.
"A menos que las personas reciban la terapia PrEP (profilaxis previa a la exposición) todos los días, el VIH se activará nuevamente y reiniciará la infección", explica Riley.
Scott Kitchen, experto en enfermedades infecciosas de la Universidad de California, en Los Ángeles, describe los medicamentos antirretrovirales contra el VIH como un "milagro" de la medicina moderna, pero señala que aún no representan una cura para la infección.
Encontrar una cura está resultando ser un gran desafío para los investigadores, "uno de los objetivos más difíciles de la ciencia", afirma Riley. "Venceremos los cánceres sólidos [cánceres con tumores] porque entendemos bien cuál es el problema y cómo resolverlo. Pero con el VIH, aún no tenemos una solución al problema", señala.
El problema: el VIH se esconde en el genoma humano
Una infección por VIH es extremadamente difícil de curar porque el virus es increíblemente eficaz para esconderse en nuestras células.
Cuando el VIH infecta nuestro cuerpo, se integra en nuestro material genético y permanece oculto en los genomas de nuestras células en un estado latente e inactivo.
Luego, se activa cuando nuestras células convierten el ADN en proteínas, un proceso llamado transcripción y traducción, que es esencial para la vida. El VIH se aprovecha de este mecanismo y nuestras células, sin darse cuenta, replican el virus.
El problema es que no hay ninguna diferencia visible entre las células que albergan el VIH y las que no, por lo que no existen métodos confiables para erradicar el virus del cuerpo. Si no se puede identificar el objetivo, no se puede eliminar.
Los medicamentos antirretrovirales como la PrEP pueden suprimir el virus hasta niveles indetectables, pero el VIH sigue incrustado y oculto en el genoma humano.
¿No se ha curado ya a personas del VIH?
Siete personas han sido confirmadas como curadas del VIH mediante una terapia con células madre que reemplazó todas las células inmunitarias en sus cuerpos.
"Todos los que hasta la fecha han sido curados del VIH recibieron un trasplante de médula ósea para tratar un cáncer [leucemia o linfoma] mientras estaban infectados con VIH", explica Kitchen.
Sin embargo, esta forma de terapia con células madre no es una opción viable como cura para la mayoría de las personas con VIH. Los trasplantes de médula ósea son procedimientos complejos y conllevan un alto riesgo de muerte. Solo se realizan en pacientes en tratamiento contra el cáncer en etapas avanzadas.
"Además del alto costo, estos procedimientos, debido a los riesgos significativos que representan para el paciente, deben realizarse en un hospital o centro médico de gran nivel. Esto limita su uso en muchos lugares donde el VIH tiene una alta prevalencia", señala Kitchen.
Actualmente, Kitchen está investigando un nuevo tipo de terapia con células madre como posible cura para el VIH. Este enfoque utiliza células madre sanguíneas modificadas para eliminar las células infectadas con el virus una vez que maduran en el cuerpo.
"En esencia, se trata de una 'vacunación genética' que permitiría al cuerpo generar naturalmente células capaces de erradicar el VIH", explica.
Aunque la investigación aún está en sus primeras etapas, Kitchen destaca que su método evitaría la necesidad de quimioterapia o de encontrar un donante de células madre.
¿Podrían las terapias con células T (TCRs) curar el VIH?
Otros investigadores están apostando por las terapias con células T (TCRs) como una posible cura para el VIH, sin necesidad de trasplantes de células madre.
Las células T son un tipo de célula inmunitaria que detecta proteínas dentro de las células, como si fueran proteínas virales o sustancias tóxicas, y luego destruye la célula para eliminar la amenaza.
Si una célula está infectada con VIH, contendrá marcadores del virus, pero estos son muy difíciles de detectar para las células T normales.
Las TCRs "funcionan diseñando células T especializadas para buscar los marcadores del VIH en una célula y luego destruirla", explicó Riley.
Es como introducir en el sistema una jauría de perros de caza que han sido entrenados para reconocer el olor de un zorro.
Las TCRs están siendo probadas en varios ensayos clínicos, con un enfoque inicial en demostrar su seguridad. Aún es demasiado pronto para determinar si son efectivas o no.
Riley asegura que no es pesimista sobre la posibilidad de encontrar una cura para el VIH, aunque admite que el objetivo es tan desafiante como llegar a la Luna.
"¿Fue difícil llegar a la Luna? Sí. Pero lo logramos. Y en el proceso, inventamos nuevas tecnologías. Creo que lo mismo ocurrirá con la cura del VIH: nuestros esfuerzos nos ayudarán también a encontrar soluciones para otras enfermedades", concluye.
(gg/rml)