El presidente de Colombia, Gustavo Petro, responsabilizó al Ejército de Liberación Nacional (ELN) sobre la violencia que vive en la zona de Catatumbo, al noreste del departamento de Santander, del que dijo que el líder máximo es el Cártel de Sinaloa, del que su jefe fue “El Chapo” Guzmán, así lo afirmó en la inauguración de un complejo científico en la Universidad Industrial de Santander.
En donde afirmó que los jóvenes que tienen la posibilidad de ingresar a la universidad no recurrirán a las armas ni a recibir una paga de esa organización criminal mexicana y “matar a sus propios hermanos como sucede en el Catatumbo”.
“Los dueños de esas estructuras rojinegras que ya no significan libertad o muerte, sino sangre, sangre y sangre, no son comandantes colombianos, son los que compran la cocaína de origen mexicano. El Cártel de Sinaloa es el jefe actual del ELN, que nació en esta universidad, pero no nació con esa vocación. La revolución no puede ser muerte, no puede ser traqueteo y narcotráfico, porque la revolución tiene que ser dignidad”.
Las declaraciones de Petro ocurren luego de los ataques de Antonio García, líder del ELN, con quien se había tenido acercamiento para adelantar el proceso de paz, pero que parece que no se concretará por los hechos de Santander.
García criticó a Petro y a las disidencias de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), de las que dijo que su mayor interés es hacer negocios con el narcotráfico en el Catatumbo.
“Ese afán de enriquecimiento para seguirse fortaleciendo en el Catutumbo los llevó a violar acuerdos territoriales y políticos, realizar imposiciones a las comunidades y priorizar acuerdos con paramilitares para favorecer sus negocios. Con el tiempo no se vio que esta gente combatiera a las Fuerzas Militares y de Policía del Estado. Como tampoco fueron atacadas ni perseguidas”.
Petro escribió en su cuenta de X que Antonio García puede criticarlo todo lo que quiera, hasta intentar matarlo, pero que la historia demuestra que las las nuevas generaciones del ELN mancharon la bandera de esa organización con la cocaína.
“Rojo y negro significa Libertad o Muerte y las mafias son la esclavitud contra el pueblo. Ustedes permitieron que los traquetos levanten la bandera roji/negra y no les importó la sotana de Camilo Torres Restrepo, que aun guardo, la volveré patrimonio nacional y estará en la sala de la revolución de la casa de Nariño donde espero el pueblo llegue”, destacó el presidente.