Instagram ha anunciado el lanzamiento de las Cuentas Adolescentes en América Latina, una función diseñada para mejorar la experiencia de los jóvenes en la plataforma, con mayores protecciones y control para los padres.
A partir del 11 de febrero de 2025, Argentina, Brasil y México serán los primeros países de la región en implementar esta función, con el objetivo de promover una experiencia segura y adecuada para los adolescentes.
Nuevas funciones para padres
Según Meta, la compañía detrás de Instagram, las Cuentas Adolescentes integran una serie de protecciones que limitan quién puede contactarlos y filtran el contenido que ven. Además, los adolescentes podrán explorar contenido relevante y positivo según sus intereses, mientras que sus padres tendrán herramientas para supervisar su actividad en la red social de manera efectiva.
- Supervisión de conversaciones: Aunque los padres no podrán leer los mensajes, tendrán acceso al registro de las personas con las que sus hijos han chateado en los últimos siete días.
- Establecimiento de límites de tiempo: Los padres podrán fijar un límite de tiempo diario para el uso de la aplicación. Una vez alcanzado, el adolescente no podrá acceder a Instagram hasta el siguiente día.
- Bloqueo de la cuenta: Los padres tendrán la opción de bloquear temporalmente la cuenta de sus hijos durante la noche o en horarios específicos, asegurando que no se conecten en momentos inapropiados.
- Monitoreo de intereses: Los padres podrán ver los temas de contenido que sus hijos han seleccionado en la plataforma, permitiendo un control adecuado sobre los intereses de los adolescentes.
Más seguridad en la internet
Meta recalca que los adolescentes menores de 16 años necesitarán el permiso de sus padres para modificar las configuraciones de privacidad, lo que garantiza una mayor supervisión y control.
Esta medida busca brindar tranquilidad a las familias, manteniendo la experiencia digital de los adolescentes dentro de parámetros seguros.
Con la introducción de las Cuentas Adolescentes, Instagram refuerza su compromiso con la seguridad en línea, permitiendo que los padres mantengan un control adecuado sin sacrificar la autonomía de los jóvenes.
