El ministro brasileño de Economía, Fernando Haddad, calificó las medidas estadounidenses de “unilaterales y contraproducentes”.El gobierno de Brasil aseguró este martes (11.02.2025) que no tiene intención de entrar en una guerra comercial con Estados Unidos, pero calificó los aranceles impuestos por el presidente Donald Trump a las importaciones de acero como "medidas unilaterales" y "contraproducentes".
"Brasil no estimula ni entrará en ninguna guerra comercial", dijo a periodistas el ministro de Relaciones Institucionales, Alexandre Padilha, luego de un evento con el presidente izquierdista Luiz Inácio Lula da Silva.
"El presidente Lula ha dicho siempre con mucha claridad: las guerras comerciales no le hacen bien a nadie", enfatizó Padilha.
El mandatario republicano fijó el lunes aranceles del 25% a las importaciones de acero y aluminio a partir del 12 de marzo.
Los gravámenes afectarán con fuerza a Brasil, segundo abastecedor de acero a Estados Unidos.
"Medidas unilaterales de este tipo son contraproducentes para la mejora de la economía global" que "pierde con esa retracción, esa desglobalización que está ocurriendo", afirmó el ministro brasileño de Economía Fernando Haddad.
El ministro estimó ante la prensa que el alza arancelaria de Trump "no es una decisión contra Brasil", solo superado por Canadá como proveedor de acero a la mayor economía del mundo, sino "una cosa genérica contra todo el mundo".
Dijo que el gobierno brasileño "observa" las reacciones de otros países y está haciendo una "evaluación" sobre cómo actuar ante los aranceles de Trump.
Lula había prometido reciprocidad
A fines de enero, el propio Lula había prometido "reciprocidad" ante eventuales medidas del mandatario estadounidense.
"Si grava los productos brasileños, habrá reciprocidad de Brasil gravando los productos exportados desde Estados Unidos", afirmó entonces.
Canadá anticipó el martes una respuesta "firme y clara" a los aranceles, mientras que la Unión Europea anunció medidas "firmes y proporcionales".
Sectores empresariales expresaron preocupación pero esperan crear un espacio para negociaciones.
"Lamentamos la decisión y vamos a actuar en búsqueda del diálogo para mostrar que hay caminos para que sea revertida", dijo en una nota la confederación brasileña de industrias CNI.
La Cámara de Comercio de Estados Unidos para Brasil pidió "una solución negociada para preservar el comercio bilateral, que ha registrado récords en los últimos años".
Durante su primer mandato, Trump ya impuso aranceles del 25% sobre el acero, que luego desmontó parcialmente.
Su gobierno "creó un programa de cuotas para permitir la importación de acero y aluminio" sin aranceles, "por la falta de poder de la industria estadounidense para atender la demanda", explicó a la AFP Jackson Campos, de la exportadora brasileña AGL Cargo.
Campos vislumbró una "negociación diplomática" de Brasil para tratar de flexibilizar los aranceles.
mg (afp, Correio Braziliense)