El gobierno de Claudia Sheinbaum ha anunciado un importante plan para construir un millón de viviendas en el país, con prioridad para mujeres jefas de familia, jóvenes, adultos mayores y población indígena.
Este esfuerzo busca reducir el rezago habitacional y garantizar el derecho a una vivienda digna.
Sin embargo, alcanzar la meta en tiempo y forma dependerá no solo de la inversión y la planeación, sino también de la adopción de herramientas tecnológicas que optimicen procesos y reduzcan costos.
Expertos en la industria señalan que el uso de Modelado de Información de Construcción (BIM, por sus siglas en inglés) y la Inteligencia Artificial (IA) será claven para agilizar la producción de viviendas sin comprometer calidad ni eficiencia.
Gonzalo Villegas Chavarría, especialista en tecnología aplicada a la construcción y líder de 17.02 Studio, destaca que el sector atraviesa una transformación digital sin precedentes.
“La implementación de soluciones como el BIM está cambiando la forma en que planificamos y ejecutamos proyectos. Hoy, la tecnología permite detectar problemas antes de que ocurran, optimizar recursos y mejorar la coordinación entre equipos, lo que se traduce en menos retrasos y costos más bajos”, explica.
El BIM permite crear modelos tridimensionales con datos en tiempo real, facilitando la toma de decisiones y evitando conflictos de diseño que podrían generar sobrecostos o desperdicio de materiales.
En un proyecto de la magnitud de la construcción de un millón de viviendas, estas herramientas pueden marcar la diferencia entre cumplir la meta o enfrentar retrasos.
Además, la Inteligencia Artificial juega un papel cada vez más relevante. Según Villegas, la IA analiza patrones de uso de materiales, predice riesgos y optimiza diseños en tiempo real, lo que hace más eficiente la ejecución de las obras.
“Las empresas que no adopten estas tecnologías quedarán atrás, porque el mercado y los proyectos de gran escala exigen mayor precisión, menores costos y tiempos de entrega más rápidos”, señala.
El reto del gobierno será integrar estas innovaciones en la planeación y construcción de las viviendas, garantizando que las herramientas tecnológicas se conviertan en aliadas estratégicas para alcanzar el objetivo sin caer en sobrecostos o retrasos puntualizó el experto.