Alemania planea invertir miles de millones en gastos de defensa, pero la necesidad de prepararse mejor va mucho más allá de la Bundeswehr. El probable canciller Friedrich Merz prometió más fondos para la defensa civil."Hay un dicho muy bonito que dice: los tiempos difíciles hacen fuertes a las personas, y las personas fuertes hacen buenos los tiempos. Pero los buenos tiempos hacen débiles o ingenuos, y en eso estamos ahora", explica Daniel Schäfer, experto en supervivencia afincado en Berlín.
Habla de la preparación general de Alemania para la guerra y las situaciones de crisis, tanto en su país como en el extranjero, y es justo decir que tiene algunas preocupaciones.
Schäfer es un antiguo reservista de la Fuerza de Reacción Rápida de Alemania (KRK), sirvió en Yugoslavia y más tarde trabajó para la Oficina de Policía Criminal de Berlín. Hoy dirige campos de entrenamiento en supervivencia y es autor de un manual sobre la materia.
En su opinión, cada vez más personas deberían adquirir estos conocimientos como una cuestión de seguridad nacional básica, y afirma que Alemania podría aprender un par de cosas de Finlandia, donde el Ejército forma a civiles sin que tengan que convertirse en soldados.
Durante un debate hoy en el Bundestag (Cámara Baja del Parlamento alemán), el líder del partido democristiano CDU y aspirante a canciller de Alemania Friedrich Merz intentó ganarse el apoyo de Los Verdes para su propuesta de cambios en el freno de la deuda, ofreciendo también ampliar el alcance del gasto en defensa para incluir la defensa civil y a las agencias de inteligencia.
Refuerzo de las capacidades de defensa nacional
El reciente giro político de Estados Unidos respecto a Europa ha hecho saltar las alarmas sobre el estado de las defensas interiores del país.
En referencia al aumento del número de ataques híbridos contra infraestructuras críticas como hospitales, Ralph Tiesler, presidente de la Oficina Federal de Protección Civil y Asistencia en Catástrofes (BKK), dijo a los expertos, en una conferencia a principios de marzo de este año, que "el sistema sanitario no está suficientemente preparado para la nueva realidad".
Como reacción a la invasión a gran escala de Ucrania por parte de Rusia en 2022, el ministro de Defensa alemán, Boris Pistorius, ordenó el año pasado una reorganización de la Bundeswehr (las Fuerzas Armadas alemanas) con el objetivo de reforzar las capacidades de defensa del país.
A partir de abril, las fuerzas de defensa nacional (Heimatschutz) pasarán del Mando de Defensa Nacional de la Bundeswehr, un cuartel general conjunto que se está disolviendo, al Ejército, bajo una nueva División de Defensa Nacional. Esto se debe en parte a la previsión de que las divisiones existentes del Ejército se desplieguen en otros lugares, por ejemplo, en las fronteras exteriores de la OTAN.
Actualmente, las Heimatschutz están divididas en cinco regimientos formados por reservistas, cada uno de ellos bajo el control de un Estado regional.
Un nuevo sexto regimiento de seguridad nacional se combinará ahora con los cinco regimientos existentes, formados por soldados en activo y reservistas (inicialmente 6.000 hombres y mujeres, pero con planes de aumentar este número a decenas de miles).
Se encargará de proteger los puertos, las instalaciones ferroviarias y los puntos de tránsito de mercancías en caso de crisis o amenaza grave. Esto incluye la protección de oleoductos, carreteras para el despliegue de tropas, puentes, centros de transporte e infraestructuras digitales.
No hay suficiente personal, medicinas ni búnkeres
El año pasado, la Asociación Alemana de Ciudades y Municipios, que representa a los 14.000 ayuntamientos del país, pidió al Gobierno federal otros 10.000 millones de euros para la próxima década en protección civil. La propuesta consistía en emplear el dinero para adecuar de nuevo los 2.000 búnkeres de la época de la Guerra Fría diseminados por toda Alemania.
Sin embargo, la Oficina Federal de Protección Civil y Asistencia en Catástrofes declaró a DW que sólo 579 de esos búnkeres siguen designados como refugios públicos, y que tendrían espacio para unas 478.000 personas (el 0,56 % de la población alemana).
La Cruz Roja alemana ha advertido de la falta de alojamiento, medicinas y personal de ayuda, y reclama un fondo especial de 20.000 millones de euros (22.000 millones de dólares) para subsanar el problema. El prometido cambio en la protección civil tras la invasión a gran escala de Ucrania por parte de Rusia no se ha materializado, declaró el Secretario General de la Cruz Roja Alemana, Christian Reuter, al diario Frankfurter Allgemeine.
"Tres años después, seguimos pelados, la protección civil no está preparada para un caso de defensa", se le cita, señalando la falta de personas formadas en protección civil, de capacidades de emergencia en los hospitales y de una cadena de suministro segura para los antibióticos. Reuter calificó de "patético" el actual presupuesto de protección civil, de entre 500 y 600 millones de euros al año.
(md/rml)