Washington y Kiev presionan por un alto el fuego entre Rusia y Ucrania, pero Moscú no accede hasta ahora. ¿Qué intereses persiguen Rusia, EE. UU., la UE y Ucrania?Desde la reunión entre funcionarios estadounidenses y ucranianos en Yeda, Arabia Saudita, surgen esperanzas de un alto el fuego temporal en Ucrania. Aquí, un panorama de los intereses de los actores más importantes.
Rusia
Hasta el momento, el Gobierno de Rusia no ha mostrado interés en conversaciones de paz con Ucrania. Yuri Ushakov, asesor del presidente ruso, Vladimir Putin, declaró a la agencia rusa Interfax que la propuesta de un alto el fuego temporal en Ucrania era "apresurada". Cualquier acuerdo de paz, añadió, "debe tomar en cuenta los intereses legítimos de Rusia" y no actuar como "un respiro para Ucrania".
Según expertos, Moscú quiere hacer retroceder a la OTAN en el este de Europa y aumentar la influencia rusa en Ucrania. "No creo que sea realista que Rusia vaya a acordar algún tipo de acuerdo en el que Ucrania permanezca soberana e independiente", dijo Janis Kluge, experto de la Fundación Ciencia y Política, de Berlín (SWP), al New York Times, señalando las repetidas demandas de Moscú de nuevas elecciones en Ucrania.
En el marco de esa estrategia se sitúan las condiciones que pone Moscú para una eventual negociación de paz. Entre ellas, Moscú ya resaltó varias veces que no tolerará la presencia de tropas extranjeras en Ucrania. Y dijo que tampoco aceptará una membresía de Ucrania en la OTAN.
La devolución de territorios ucranianos anexionados por Rusia tampoco parece probable. Por el contrario, Putin ofreció al presidente estadounidense, Donald Trump, ya a finales de febrero, un acuerdo propio para la extracción de materias primas en los territorios ocupados. En una entrevista televisiva, Putin dijo que Rusia "está dispuesta a cooperar con socios extranjeros, incluidos los estadounidenses, en las nuevas regiones".
Moscú tiene un gran interés en el levantamiento de las sanciones impuestas por Occidente desde la invasión rusa de Ucrania, ya que el auge económico que desató al principio la economía de guerra en Rusia ya se ha paralizado. Existe una amenaza de recesión e inflación.
Estados Unidos
El presidente estadounidense, Donald Trump, quiere perfilarse como mediador para la paz. Si bien no pudo mantener su promesa electoral de terminar la guerra en Ucrania en 24 horas, logró aumentar la presión sobre Kiev y Moscú.
El secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, declaró en la cumbre de ministros de Exteriores del G7, en la ciudad canadiense de Charlevoix, que sería "perfecto" si desde la cumbre se emitiera el mensaje de que "Estados Unidos ha hecho algo bueno para el mundo".
La paz también facilitaría que Trump pudiera reducir los gastos militares y de ayuda humanitaria para Ucrania. Eso se adecúa a sus planes de reducir el compromiso de Estados Unidos con la OTAN y obligar a los países europeos a aumentar su gasto en defensa.
Otro interés de Estados Unidos es el acceso a las materias primas. Ucrania dispone de materias primas fósiles, como el gas, y de minerales importantes. Aunque el acuerdo entre Ucrania y EE. UU. fracasó, por el momento, tras el escándalo en la Casa Blanca a finales de febrero, el presidente ucraniano Zelenski ha aceptado posteriormente firmarlo.
Los expertos temen que la presión que Trump se ha impuesto a sí mismo al prometer poner fin rápidamente a la guerra pueda llevarlo a hacer concesiones de gran alcance a Putin.
Unión Europea (UE)
El miedo a que la guerra de Ucrania se extienda ha producido en la UE un aumento drástico de los gastos en defensa. Países que fueron neutrales durante décadas, como Finlandia y Suecia, han ingresado a la OTAN.
La mayoría de los Estados miembros del bloque, además, se han unido a las sanciones económicas de la UE contra Rusia. "Tenemos que llevar a Ucrania a la posición más fuerte posible. Las sanciones son un instrumento de presión", dijo la jefa de la diplomacia de la UE, Kaja Kallas.
Además, Bruselas quiere poner coto a la creciente influencia de Rusia en Europa y, por lo tanto, mantiene abierta la perspectiva de que Ucrania se una a la UE. El país es candidato a ser miembro de la UE desde junio de 2022.
Entre los países europeos que simpatizan con Moscú están, entre otros, Serbia, candidato a formar parte de la UE, y los miembros de la UE Hungría y Eslovaquia. En Rumania, el candidato de extrema derecha a la presidencia Calin Georgescu, recibió apoyo de Moscú, pero, entretanto, fue excluido de los comicios por el Tribunal Constitucional rumano.
Ucrania
El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, está dispuesto a hacer concesiones, en vista de la presión masiva de Estados Unidos. Hasta hace poco, la posición oficial de Kiev era "no hablar con Putin" y "reconquistar todos los territorios ocupados por Rusia, inclusive Crimea y el este de Ucrania".
Entretanto, Kiev valora como éxito el hecho de que, luego del escándalo en la Casa Blanca, EE. UU. haya reanudado la ayuda militar para Ucrania, y el intercambio de información de inteligencia con ese país. En caso de un posible acuerdo, también existe la perspectiva de posibles garantías de seguridad por parte de EE. UU.
Aunque un alto el fuego ciertamente no incluiría la devolución de los territorios ocupados, Ucrania espera recuperar estos territorios a largo plazo. Al mismo tiempo, Kiev depende del apoyo internacional para fortalecer su posición y garantizar que se mantenga la presión sobre Rusia.
(cp/rml)