La noche de este 13 de marzo, una incidente aéreo sorprendió a los pasajeros y autoridades del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM). Un avión de la aerolínea KLM, proveniente de Ámsterdam, Países Bajos, se vio obligado a realizar un aterrizaje controlado debido a una falla en una de sus llantas.
En un primer momento, se mencionó que el incidente ocurrió cuando la aeronave, que cubría la ruta entre Ámsterdam y la Ciudad de México, comenzó a presentar problemas técnicos en una de sus partes cruciales: el sistema de aterrizaje.
Este sistema es vital para garantizar que el avión pueda tocar tierra de manera segura, por lo que lo recomendable es iniciar un procedimiento de aterrizaje controlado.
Aunque los detalles exactos sobre la naturaleza de la falla aún no han sido completamente revelados, las autoridades del aeropuerto confirmaron que se trató de una llanta con baja presión.
De acuerdo con los primeros reportes, el avión pudo realizar el aterrizaje sin mayores complicaciones. Las autoridades del AICM tomaron medidas rápidas y eficaces para asistir a la aeronave, garantizando la seguridad de los pasajeros y tripulantes.
En la cuenta oficial del AICM en X, se aseguró que no se registró ninguna emergencia y se explicó qué fue lo que sucedió con el avión proveniente de Ámsterdam:
“Con relación a la información que circula en redes sociales y en medios de comunicación, se informa que no se registró ninguna emergencia en el AICM. El piloto de un avión informó que su sistema le reportó que una de sus llantas tenía baja presión. El aeropuerto por procedimientos de seguridad inició sus protocolos, el avión aterrizó normal y sin contratiempos".
El vuelo de KLM, que había salido de Ámsterdam, fue atendido con prontitud por personal de emergencia en el AICM, asegurando que los pasajeros pudieran desembarcar sin problemas.
