La población católica mundial sigue en aumento. De acuerdo con el último informe estadístico del Vaticano, el número de católicos bautizados creció un 1.15% entre 2022 y 2023, al pasar de 1,390 millones a 1,406 millones de personas, lo que refuerza la presencia global de la Iglesia católica.
Este crecimiento no ha sido uniforme en todos los continentes, pero América se mantiene como el epicentro católico mundial, concentrando el 47.8% del total de fieles. De ese porcentaje, Sudamérica representa el 27.4%, con Brasil a la cabeza como el país con más católicos del mundo: 182 millones, lo que equivale al 13% de todos los católicos globales. En México, la Iglesia continúa siendo una de las instituciones con mayor influencia social y espiritual, aunque aún no se publican los datos desglosados del país.
Mientras tanto, África registra el mayor crecimiento relativo, con un salto del +3.31%, al pasar de 272 a 281 millones de católicos. Asia también avanza, pero de forma más moderada, con un +0.6%, con Filipinas y la India como países predominantes. En contraste, Europa se estanca, con un crecimiento de apenas 0.2%, a pesar de seguir concentrando a más del 20% de los católicos del mundo.
Más católicos, menos sacerdotes: América, en desventaja
Aunque América concentra casi la mitad de los católicos del mundo, sólo el 29.1% de los sacerdotes están en este continente, lo que genera un desequilibrio en la atención pastoral. En comparación, Europa, con menos del 21% de los católicos, concentra el 38.1% del clero mundial, una brecha que preocupa ante el descenso de vocaciones.
En el continente americano, el número de sacerdotes cayó un 0.7% en el último año, mientras que en África y Asia aumentó. Además, el promedio de católicos por sacerdote en América es de 334 mil fieles por cada uno, muy por encima del promedio global de 259 mil.
La falta de vocaciones también impacta en los seminaristas mayores, que han disminuido en casi todos los continentes, excepto en África. En América, el número de candidatos al sacerdocio representa solo el 25.7% de los seminaristas del mundo, muy por debajo de su peso poblacional católico, que es del 47.8%.
Aumentan los diáconos, pero las religiosas siguen bajando
Un dato llamativo es que los diáconos permanentes han crecido un 2.6%, con América a la cabeza, especialmente en Estados Unidos. Hoy, América concentra el 39% de todos los diáconos del mundo, una figura clave de apoyo pastoral en tiempos de escasez de sacerdotes.
En contraste, el número de religiosas profesas sigue cayendo: de 599,228 en 2022 a 589,423 en 2023, lo que representa una caída global del 1.6%. América del Sur registró una baja del 3%, mientras que América del Norte cayó un 3.6%, en parte por el envejecimiento de muchas congregaciones religiosas. Sólo África y el sudeste asiático mostraron cifras positivas.
La misión continúa: retos para América Latina
Los datos revelan un fenómeno claro: aunque el catolicismo sigue creciendo en número, sobre todo en América Latina, la Iglesia enfrenta un serio desafío de relevo generacional y equilibrio pastoral. A esto se suma el reto de mantenerse vigente ante nuevas corrientes espirituales, culturales y sociales.
En este contexto, México, como uno de los países más católicos del mundo, mantiene un rol clave en el panorama global de la Iglesia. El crecimiento de la fe no es suficiente: ahora, el foco está en formar nuevos líderes, apoyar vocaciones y garantizar la presencia pastoral en las comunidades.
