El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, aseguró que México y Canadá han fortalecido su seguridad fronteriza tras la amenaza de imponer aranceles del 25 % a sus importaciones.
“México y Canadá han mejorado mucho. Vemos cómo funciona”, afirmó el mandatario durante una reunión en la Casa Blanca, donde estuvieron presentes Ron Johnson, nominado a embajador en México, y Pete Hoekstra, nominado a embajador en Canadá.

Trump anunció los aranceles como represalia por el tráfico de fentanilo, un opioide sintético que ha provocado miles de muertes por sobredosis en Estados Unidos.
En la misma reunión, también recibió a otros nominados a embajadores, como Kevin Cabrera, propuesto para Panamá, y Brandon Judd, para Chile.
Presión diplomática
La medida comercial fue vista como una presión diplomática para que los gobiernos de Claudia Sheinbaum y Justin Trudeau reforzaran sus estrategias contra el tráfico de drogas y la migración irregular.
Trump utilizó los aranceles como una estrategia de presión económica y diplomática para forzar a los países vecinos a tomar medidas estrictas en la lucha contra el narctráfico, particularmente en relación con la distribución de fentanilo.

El republicanos ha amenazado con imponer aranceles a las importaciones de productos mexicanos y canadienses si los países no colabora estrechamente en temas de seguridad fronteriza, control de drogas e inmigrantes. La cual fue vista como una estrategia para negociar acuerdos más favorables en términos de seguridad y cooperación en el contra del drogas.
Aunque México y Canadá rechazaron inicialmente la imposición de estos aranceles, ambos países tomaron medidas más estrictas para abordar el tráfico de narcóticos en sus territorios.
La secretaría de Seguridad Nacional del Gobierno de Estados Unidos, Kristi Noem, llegará el viernes a México, para reunirse con la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, la cual será la primera visita al país de un alto funcionario, en el marco de las intensas negociaciones por los aranceles