La tarde de este jueves 27 de marzo, un sismo de magnitud 5.0 tuvo epicentro al sureste de Petatlán, Guerrero. Aunque el temblor alertó a muchos capitalinos a través de notificaciones en sus celulares, lo que generó una sensación de alarma, una pregunta surgió rápidamente entre los habitantes: ¿por qué no sonó la alerta sísmica en la ciudad?
La alerta sísmica es una de las herramientas más importantes con las que cuenta México para mitigar los efectos de los sismos, pues permite a las autoridades y a la población estar preparados ante la llegada de las ondas sísmicas.
Este sistema es operado por el Sistema de Alerta Sísmica Mexicano (Sasmex), que es gestionado por el Centro de Instrumentación y Registro Sísmico A. C. (Cires). El propósito del Sasmex es ofrecer un aviso con antelación cuando se detecta un sismo fuerte, permitiendo a los habitantes tomar medidas preventivas.
El sistema cuenta con una red de sensores que cubren diversas regiones sísmicas del país, incluidas las zonas de subducción de la Placa de Cocos y el sur del Eje Neovolcánico Transversal. Estos sensores están distribuidos en los estados de Jalisco, Colima, Michoacán, Guerrero, Puebla, Oaxaca y otras zonas de alto riesgo sísmico.
Cuando se detecta un temblor, el sistema calcula en pocos segundos la magnitud del sismo y emite un aviso a través de ondas de radio a las ciudades que están cubiertas por la alerta, como la Ciudad de México, Chilpancingo, Acapulco, Oaxaca, Morelos y Puebla.
¿De qué depende que suene la alerta sísmica?
Aunque la alerta sísmica funciona de manera eficiente en muchos casos, no siempre se activa, y esto depende de varios factores. El sistema no está diseñado para emitir una alerta sólo por la intensidad del temblor, sino que se activa en función de la estimación preliminar de la energía liberada por el sismo en los primeros segundos.
Este modelo de proyección permite prever el impacto en las zonas cercanas al epicentro, pero también depende de otros factores, como la distancia entre el epicentro y las ciudades afectadas, así como la infraestructura del sistema.
En el caso del sismo de este jueves, a pesar de que la magnitud fue de 5, la activación de la alerta sísmica no ocurrió debido a que el epicentro estaba ubicado a una distancia que no justificaba la emisión de una alarma en la Ciudad de México.
De acuerdo con el protocolo del Sasmex, para que la alerta sísmica se emita en la capital, el sismo debe cumplir con ciertos parámetros, como una magnitud mínima de 5.5 en un epicentro cercano, o bien una magnitud superior a 6 si el epicentro está a más de 350 km de distancia.