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¿Por qué siempre llueve en Semana Santa? La razón te va a sorprender

Aunque no lo creas, hay una explicación científica detrás de esta coincidencia entre el mal clima y los días de descanso

¿Por qué siempre llueve en Semana Santa? La razón te va a sorprender Joaquin Corchero - Europa Press

Cada año, la llegada de la Semana Santa viene acompañada de un pronóstico incierto: lluvias, cielos nublados y temperaturas bajas justo en días en los que muchas personas planean vacaciones o actividades al aire libre.

Sí hay una explicación científica para la lluvia en Semana Santa

Hay quienes dicen que no es cierto que siempre llueva en Semana Santa, y que más bien se trata de un caso de memoria selectiva, de acuerdo con la agencia de noticias Europa Press.

Al ser una temporada con muchas actividades al aire libre -como procesiones, viajes a la playa o al campo-, cuando llueve lo sentimos como algo especialmente molesto y lo recordamos con más fuerza.

Sin embargo, hay una explicación científica detrás de esta coincidencia entre el mal clima y los días de descanso.

¿Por qué Semana Santa cae en distintas fechas cada año?

La Semana Santa no tiene una fecha fija. En el Concilio de Nicea (año 325), se estableció que la Pascua de Resurrección se celebraría el domingo siguiente a la primera Luna llena después del equinoccio de primavera (21 de marzo). Por lo tanto, el Domingo de Ramos siempre es el domingo anterior, y la Semana Santa.

¿Y qué tiene que la fecha de Semana Santa con el clima?

Durante la primavera, especialmente al inicio, es común que el clima sea inestable. En esta época suelen presentarse lluvias, cielos nublados y cambios bruscos de temperatura. También pueden ocurrir fenómenos meteorológicos como la “gota fría” o Depresión Aislada en Niveles Altos (DANA), que provocan lluvias intensas y repentinas.

En su libro Entender el tiempo, el meteorólogo Roberto Brasero explica que la Semana Santa coincide con una época del año en la que, en muchas regiones de España (y también en México), hay mayor probabilidad de lluvias.

Además, en estos días suele haber una mayor interacción entre borrascas provenientes del norte y corrientes de aire cálido, lo que libera energía en la atmósfera y favorece la formación de tormentas.

No es que la lluvia sea una tradición de Semana Santa, pero sí es cierto que el clima durante estas fechas tiende a ser cambiante. Así que si estás planeando un viaje, no olvides empacar paraguas... por si acaso.

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