William Turner es uno de los más grandes pintores románticos de la historia. Plasmó en el lienzo la grandeza de la naturaleza con magnificencia.Su retrato adorna el billete de 20 libras y el premio de arte moderno más importante de Gran Bretaña lleva su nombre: se trata de Joseph Mallord William Turner (1775-1851), un pintor que hizo historia. Atardeceres resplandecientes, torres de nubes oscuras, rocío espumoso... Turner dominaba como nadie la interacción de la luz, el color y la atmósfera. Se inspiraba en la naturaleza y en los viajes.
A lo largo de su vida, Turner viajó no sólo por Gran Bretaña, sino también por Países Bajos, Bélgica, Francia, Italia y Alemania. Allí quedó fascinado por el caudaloso río Rin. Los paisajes que pintó allí también despertaron el deseo de viajar de los británicos e hicieron de Renania un destino popular. Hoy se considera a Turner uno de los padres del romanticismo renano.
Sin embargo, Venecia influyó especialmente en Turner. Visitó la ciudad del norte de Italia tres veces, en 1819, 1833 y 1840, y las vistas de Venecia de Turner ilustran el desarrollo de su estilo. Sus cuadros se volvieron cada vez más borrosos, místicos e inundados de luz, un elemento que utilizó para crear atmósferas como pocos. No en vano sus pinturas se conocen también como cuadros de cuentos de hadas. Turner parece haber captado el espíritu de la época, ya que sus obras son extremadamente populares.
"La luz es, por tanto, el color”, así describió Turner la importancia de la luz en una conferencia ya en 1818. Se dice incluso que hacía esperar a oscuras a los visitantes de su estudio antes de llevarlos a visitar su exposición, para que fueran más conscientes de los efectos luminosos de sus cuadros.
¿Quién era William Turner?
Nacido en Londres el 23 de abril de 1775, Turner creció durante la Revolución Industrial, que estuvo asociada a una gran agitación económica y social. Realizó sus primeros bocetos de paisajes a los doce años. Su padre, que era barbero y peluquero de profesión, reconoció su talento y expuso los cuadros de su hijo para venderlos en su tienda.
Con sólo 14 años ingresó como estudiante en la Royal Academy of Art de Londres, donde al principio pintaba sobre todo acuarelas. Más tarde, él mismo enseñó allí como profesor de perspectiva.
Un tipo diferente de pintura histórica
Sin embargo, los cuadros de Turner no se limitaban a representar la naturaleza. En lugar de ello, Turner incluyó además en sus obras acontecimientos contemporáneos y, de forma inusual para la época romántica, también pintó logros técnicos como locomotoras y barcos de vapor luchando contra las fuerzas de la naturaleza.
Los acontecimientos históricos y míticos también tienen cabida en sus cuadros, aunque son puestas en escena poco habituales.
La obra tardía de Turner se volvió cada vez menos convencional y suscitó una gran incomprensión. En 1842, la Royal Academy expuso el cuadro "Tormenta de nieve”, que hoy es una de sus obras más famosas. Muestra un barco de vapor luchando contra los elementos de la naturaleza. Fue precisamente este estilo casi abstracto, por el que Turner fue criticado en su momento, el que inspiró a impresionistas posteriores como Claude Monet y Camille Pissaro.
Hoy en día, Turner es considerado el padre del impresionismo, un pionero poco convencional del modernismo e incluso un precursor del arte abstracto por algunos. En cualquier caso, se adelantó mucho a su tiempo.
(mn/ers)