Una potente explosión sacudió este sábado el puerto de Shahid Rajaee, en la ciudad de Bandar Abás, al sur de Irán, dejando un saldo de al menos cuatro muertos y más de 500 heridos, según confirmaron autoridades locales. El incidente afectó una amplia zona del puerto, dañó edificios a varios cientos de metros y desató un incendio de gran magnitud que continúa activo.
El presidente de Irán, Masoud Pezeshkian, ordenó una investigación inmediata para esclarecer las causas del accidente y envió al ministro del Interior a la región para “examinar la magnitud del accidente”, informó a través de su cuenta en X (antes Twitter).
La explosión, que se originó en la zona química y de azufre del puerto, provocó que contenedores cargados con productos peligrosos estallaran, incluyendo petróleo y transporte marítimo general de acuerdo con CNN. Sin embargo, las autoridades advirtieron que será necesario extinguir completamente el incendio antes de determinar la causa exacta del siniestro.
¿Ataque de Israel a puerto petrolero?
Fatemeh Mohajerani, portavoz del gobierno, explicó que algunos contenedores con productos químicos almacenados en una esquina del puerto probablemente provocaron la explosión. “Hasta que no se controle por completo el fuego, no se podrá confirmar el origen”, indicó.
Por su parte, funcionarios israelíes negaron estar involucrados en el incidente, luego de que surgieran especulaciones tras el historial de tensiones entre ambos países. Según el Canal 12 de Israel, el gobierno aseguró que no tuvo participación en lo ocurrido.
Un puerto estratégico para el comercio y la industria de Irán
Shahid Rajaee es una de las principales instalaciones portuarias de Irán, con una extensión de 2,400 hectáreas. Gestiona aproximadamente 70 millones de toneladas de carga anualmente y cuenta con 35 atracaderos, además de vastos almacenes que suman más de 500,000 metros cuadrados, según información de CNN.
Tras el incidente, las actividades portuarias fueron suspendidas para facilitar las labores de rescate y evitar nuevos riesgos. El sonido de la explosión fue tan fuerte que se escuchó hasta a 50 kilómetros de distancia, según reportes locales.
A pesar de la magnitud de la tragedia, la Compañía Nacional de Refinado y Distribución de Petróleo informó que sus operaciones en Bandar Abás no se han visto afectadas.
Cabe recordar que este mismo puerto sufrió un ataque cibernético en 2020, atribuido entonces a Israel, lo que aumenta la sensibilidad ante este tipo de incidentes en la región.
