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Hombre engaña a abuelita para entrar a su casa, la somete y la despoja

La abuelita dejó pasar a un sujeto hasta sus aposentos, y estando ahí fue sometida con brutalidad para ser robada

Sujeto golpea y roba a abuelita en su casa de Azcapotzalco
Sujeto golpea y roba a abuelita en su casa de Azcapotzalco (Especial)

Un acto de extrema crueldad ha causado indignación en la alcaldía Azcapotzalco de la Ciudad de México, donde una abuelita fue agredida y despojada de sus pertenencias dentro de su propio hogar por un hombre que logró ganarse su confianza mediante el engaño.

Los hechos, captados por las cámaras de seguridad de la vivienda, muestran la brutalidad con la que actuó el agresor, quien en ningún momento mostró compasión ante el sufrimiento de la mujer. La víctima, una persona de la tercera edad, manifestó varias veces su incomodidad durante el sometimiento, pero el sujeto persistió con violencia.

Hombre engaña a abuelita y la somete con brutalidad

En los videos difundidos a través de redes sociales, se observa al hombre aproximarse a la abuelita con el pretexto de ayudarla a reparar un objeto, lo que le permite ingresar a la vivienda bajo falsas intenciones.

Una vez dentro, las cámaras instaladas en la recámara de la abuelita captan el momento en que el sujeto la sigue mientras ella busca algo en un mueble. Al notar que el hombre ha entrado hasta su cuarto, la señora se sorprende, pero no reacciona con alarma, y le expresa que “por ahora no tiene dinero para darle para las reparaciones”.

La víctima le indica en varias ocasiones los trabajos que deben realizarse en otras áreas de la casa y le aclara que en su recámara no hay tareas pendientes. Sin embargo, el hombre insiste en permanecer ahí y le pide “tantita crema para sus manos”, para luego aprovechar el momento y someterla.

Video: Delincuente agrede a la abuelita

Tras aceptar darle la crema, el sujeto vuelve a ingresar a la recámara, donde la agrede con violencia. La azota contra la cama e intenta taparle la boca mientras la mujer, entre sollozos, ruega por ayuda.

El agresor la deja tirada en el piso, mientras ella llora y suplica. Luego se dirige al ropero, de donde sustrae un objeto de valor. Antes de huir, le propina un golpe en el rostro a la abuelita y le grita “cállese, cállese”, para después escapar del lugar.

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