El Operativo Mochila volverá a aplicarse a partir de este lunes en la escuela secundaria Carmen Serdán de Guadalupe y podría extenderse a otros planteles para verificar que los alumnos no ingresen, en especial, con medicamentos controlados, tal y como sucedió la semana pasada en esta institución.
Y aunque hay papás y mamás que se oponen a esta práctica, el anuncio fue bien recibido por la Asociación de Padres de Familia de Nuevo León.
“Desgraciadamente son situaciones muy complejas, todo inicia desde la pandemia. Para bien o para mal los padres de familia deben estar muy pendientes de sus hijos, tanto de los menores como de los adolescentes para vigilar que no tengan acceso a cualquier tipo de sustancia. Tener psicotrópiocos no es cualquier cosa, hay que estar al pendiente de nuestros hijos”, señaló Adriana Dávila, presidenta del organismo.
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La semana pasada, una estudiante de la secundaria Carmen Serdán ingresó al plantel con el medicamento controlado conocido como clonazepam.
Trascendió que dos compañeros ingirieron el medicamento y tuvieron que ser atendidos por los servicios médicos, aunque se les reportó como fuera de peligro.
Dávila calificó de positivo el regreso de la Operación Mochila porque siempre es importante saber qué llevan los chicos.
“Debe implementarse el operativo, no se debe bajar la guardia. Es positivo que se haga, pero con todo el protocolo que establece la Secretaría de Educación”, señaló Dávila. “Además, los papás debemos colaborar con las escuelas, con los maestros. Debemos cumplir con el protocolo porque eso puede garantizar que nuestros hijos puedan ir de forma más tranquila a la escuela”.
Para la presidenta de la Asociación todo plantel educativo, sin importar nivel socioeconómico, está en riesgo.
“La drogadicción no respeta ninguna situación socioeconómica así que hay que estar alertas y prevenir cualquier indicio negativo que puedan estar sufriendo nuestros niños”, añadió.
Dávila advirtió que los padres de familia, o los responsables de los menores, deben estar alerta a cualquier comportamiento fuera de lo normal.
“Tener una comunicación abierta con ellos y dialogar abiertamente en el seno de la familia, de todos los problemas o todos los riesgos que puedan enfrentar los estudiantes.
“Tenemos que darnos cuenta de que es una realidad el consumo de sustancias, es un peligro que está presente”.
También, añadió, existe el problema de la falta de comunicación en la familia, lo cual es sumamente delicado.
“Muchas veces ni siquiera conocemos a nuestros hijos. Y no nos vamos a dar cuenta cuando hay un cambio de comportamiento, es por eso que todos los papás realmente estén atentos a lo que sucede con los hijos, que estén al pendiente de los amigos con quienes se juntan y con quienes actúan diariamente”, destacó Dávila.
Para la presidenta de la Asociación de Padres de Familia, el comportamiento después de haber estado confinados por la pandemia, sufrió cambios drásticos.
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“Definitivamente todos los estragos que dejo el confinamiento por el covid 19 tiene mucho qué ver con lo que está pasando”, advirtió, “estamos en un tiempo delicado, salimos desbordados en nuestro comportamiento, independientemente de la situación socio cultural. Entonces es importante que todos estemos atentos a lo que pasa”.