Al reconocer que en el Gobierno del Estado hay mucha preocupación por la sequía que afecta a municipios de Nuevo León, Juan Ignacio Barragán informó que ya se solicitó a la Federación la renovación del estado de emergencia en la entidad.
El director de Agua y Drenaje indicó que aunque no es competencia de la paraestatal, sí existe inquietud por lo que pueda suceder a nivel agricultura y ganadería.
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“Hay un problema serio en el sector agropecuario y hay una preocupación muy seria en el Gobierno del Estado. Agua y Drenaje no tenemos mucho qué hacer ahí, pero sí hay una preocupación fuerte”, reveló Barragán. “Pedimos a Dios que pronto nos mande la lluvia porque sí está complicado”.
El funcionario dijo que este principio de año, a partir más o menos de noviembre, las lluvias se vinieron abajo.
“Diciembre, enero y febrero han sido de los peores meses de la historia en cuanto a precipitaciones. Marzo va mal, pero pareciera que va a comenzar a llover en estos días próximos. Ya me canso de ver los pronósticos meteorológicos, me los cambian cada 15 minutos”, expresó.
Barragán informó que ya se solicitó a la Federación la renovación del estado de emergencia.
“Efectivamente, hay una sequía muy fuerte. Ya hicimos la solicitud; primero hay qué recordar que el estado de emergencia por sequía estatal sigue vigente. Se autorizó a finales de enero del año pasado y no se ha levantado esa emergencia”.
La federal, por el contrario, sí tenía vigencia.
“Ya solicitamos a través de Protección Civil a la Federación la renovación de ese decreto de emergencia”, explicó Barragán. “No hemos tenido respuesta todavía, pero se justifica ampliamente por la cantidad de municipios que tenemos en sequía”.
Al menos cuatro municipios de Nuevo León fueron clasificados por la Comisión Nacional del Agua con “sequía extrema” y otros 24 con “sequía severa”.
El Centro de Predicción Climática de Estados Unidos, de acuerdo a un reporte emitido el 28 de febrero de este año, y con validez del 1 de marzo al 31 de mayo, señala que gran parte de Texas se encuentra en condición de sequía extrema mientras que otra zona del estado está desarrollando esta condición y se dirige hacia el norte de México, especialmente a Nuevo León.
“Representa tendencias a gran escala basadas en probabilidades derivadas subjetivamente y guiadas por previsiones estadísticas y dinámicas a corto y largo plazo. Zonas de sequías en curso basadas en áreas de vigilancia”, señaló el Centro.
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La falta de lluvias también está motivando que el nivel de las presas, ante un “verano adelantado”, por las temperaturas de hasta 40 grados que se registraron en Nuevo León, estén bajando de forma drástica.
