La mosca es uno de los insectos más molestos y que prácticamente se encuentran en cualquier lugar, son además, los que mayor cantidad de bacterias pueden transportar porque prácticamente se posan y se alimentan de cualquier cosa, llevando enfermedades de un lugar a otro.
Muchas especies pueden transmitir hasta 100 padecimientos al ser humano, como salmonella, disentería, cólera, tuberculosis, ántrax y gusanos.
Cuando una mosca se posa en cualquier parte del cuerpo humano lo más probable es que muerda dando lugar a una herida considerable, tomando en cuenta el tamaño del bicho y dejando la piel expuesta a diferentes contagios.
En los últimos años la población de la llamada “mosca negra” se ha extendido de manera considerable en todo el planeta.
Su mordedura puede causar tal daño que incluso provoca que una persona vaya al hospital por una reacción alérgica.
Su sistema para alimentarse consiste en rasgar la piel con sus mandíbulas y así poder extraer sangre. Al mismo tiempo inyecta un anestésico que impide a la persona darse cuenta que está siendo atacada.
Después de este tiempo aparece una roncha que provoca picazón y que puede permanecer en la piel más de una semana.
Ante esta situación, además de que se reproducen de forma rápida y representan un problema de salud, las moscas nunca son bienvenidas dentro de una casa.
La época de calor es el momento perfecto para su reproducción al grado de que se le ha llegado a llamar “temporada de moscas”.
¿Cómo combatirlas?
Hay diferentes formas de combatirlas, desde los insecticidas comerciales que han demostrado ser efectivos para controlar la plaga, sin embargo representan un riesgo para las personas y los animales domésticos ya que la permanencia de la sustancia en el ambiente es prolongada.
Pero hay opciones que no son dañinas para el medio ambiente y aquí presentamos algunas porque aún faltan varios meses para que la población de estos bichos disminuya o desaparezca.
Aunque están presentes durante todo el año la temporada en la que más mayor número de bichos hay es durante el verano y principios del otoño.
- Papel atrapamoscas
También conocidas como “cintas upstore” se trata de una simple tira con pegamento que se coloca en cualquier lugar de la casa.
En cuanto las moscas se posan en él quedan inmediatamente imposibilitadas para volver a volar.
El único inconveniente es que no resulta muy agradable de ver a un número importante de moscas pegadas en el papel
- Bolsas con agua
Aunque parece un sistema extraño, colgar bolsas blancas llenas de agua da buenos resultados desde hace varios años.
No se sabe con exactitud por qué funciona para ahuyentar a las moscas, pero se piensa que la luz que se refleja en el agua provoca un efecto visual que daña los ojos de las moscas.
Simplemente se debe llenar la bolsa con agua y colgarla del techo o del marco de alguna puerta.
- Plantas
Además de que nos ayudarán a mantener un ambiente fresco dentro del hogar algunas plantas pueden ayudar a espantar a las moscas.
Tal es el caso de la menta citronela caléndula, albahaca, lavanda, romero, ajenjo y la citronela.
- Vaporización con vinagre
Si bien el vinagre no matará a estos insectos sí provocará un efecto en el que sus movimientos se vuelven más lentos por lo que su exterminio será más fácil.
Simplemente hay que colocar un vaporizador con agua y vinagre en el lugar donde hay más moscas y dejar que haga efecto.
- Cloro
Otra buena opción es limpiar todas las superficies con una mezcla de agua y cloro que también se puede utilizar para trapear los pisos.
El olor al cloro es intolerable para las moscas por lo que una vez que se aplique esta sustancia será fácil darse cuenta de que estos insectos voladores desaparecen de la zona.
