Puede ser “vishing”, “QRishing” o “phishing”. Por más sofisticado que sea el término siempre significa lo mismo: fraude, uno de los delitos que más impactan a nivel nacional y el Estado no es la excepción.
A nivel estatal, de acuerdo a Data Nuevo León, en 2024 se cometieron 4 mil 699 fraudes. Abril fue el mes que alcanzó mayor número con 528 y diciembre fue el de menor con 251.
Anualmente en la entidad se reportan 19 mil 600 casos de hackeo a dispositivos digitales, de acuerdo a información de la Policía Cibernética.
“Pero es un crimen muy común, el hecho de que únicamente se registren 251 no significa que vaya a la baja. Los criminales cibernéticos siempre están buscando la manera, digamos de ´innovar´”, señaló César Lugo, experto en ciberseguridad.
Las estadísticas de Data Nuevo León comenzaron en enero de 2015 y desde entonces el año con mayor cantidad de fraudes es 2016. En agosto se registraron mil 209 y el diciembre 882.
“En Nuevo León los tipos más comunes de fraude son: pirámides financieras, extorsiones, falsos premios, falsos préstamos, venta de productos apócrifos o suplantación de identidad”, explica Lugo.
Cada vez, agregó, las modalidades van tomando términos más sofisticados.
“Tenemos, por ejemplo, el ´QRishing´, que es de los más recientes y que consiste en que los delincuentes te dejan un pegote con un código QR”, señaló. “Hace unos meses se hizo muy popular en municipios como Apodaca… presuntamente se trataba de una multa, pero en el momento en que escaneabas el código con tu celular los delincuentes tenían acceso a toda tu información, incluyendo la bancaria”.
Lugo enumero también el llamado “vishing”, una forma de ingeniería social, al igual que el “phishing” y el “smishing”.
“Es una estafa telefónica a través de la cual se suplanta la identidad de una persona, empresa u organización de confianza. Los delincuentes obtienen información personal y sensible de la víctima”.
El “smishing” es un tipo de fraude en el que los ciberdelincuentes envían c (SMS) para obtener información personal o financiera.
Y con el “phishing” se suplanta la identidad de una entidad legítima, como un banco, una red social o una institución pública, para engañar a las víctimas.
El objetivo es obtener datos como contraseñas, números de tarjetas de crédito, identidad, entre otros, para usarlos de forma fraudulenta.
¿Cómo se logra la estafa?
Lugo destacó que una estafa se logra a través de:
- Transferencias electrónicas.
- Transferencias de dinero.
- Servicios de pago P2P.
- Aplicaciones móviles de pago.
- Tarjetas de regalo.
- Criptomoneda.
Alertó para estar siempre en guardia y desconfiar de:
- Correos alarmantes. Aquí se usa el factor sorpresa para obtener información bancaria personal.
- Ofertas atractivas. Por lo regular parecen se demasiado buenas para ser verdad. Hay que hacerle caso a la intuición.
- Suscripciones gratuitas. Invariablemente contienen códigos maliciosos.
- Links fraudulentos. Piden dar click en una liga y esta te lleva a un sitio donde te roban datos.
¿Cómo evitar ser víctimas?
- No enviar dinero a personas desconocidas.
- No dar información personal a través de llamadas telefónicas.
- No contestar llamadas de personas desconocidas.
- Verificar que el número de teléfono al que se llama sea el auténtico del banco.
