Más allá de, si con las adecuaciones a las Leyes Orgánica de la Administración Pública Federal, de la Guardia Nacional, del Ejército y Fuerza Aérea Mexicanos y de Asensos y Recompensas, en materia de Guardia Nacional y Seguridad Pública aprobadas el pasado 09 de septiembre, se está militarizando a nuestro país que, al respecto, existen opiniones serias que así lo señalan, las cuales son muy respetables, pero no comparto.
Dichas reformas son inconstitucionales, como lo he dicho en anteriores columnas, ese es un tema que le corresponderá determinar a la Suprema Corte de Justicia de la Nación en el momento en que resuelva las acciones de inconstitucionalidad y los juicios de amparo que, en su caso, se interpongan en su contra.
Debo dejar muy clara la postura del Grupo Parlamentario del Partido Verde Ecologista de México en el Senado de la República, para nosotros, lo más importante siempre ha sido, es y será, la paz y tranquilidad de las familias mexicanas y consideramos que estas modificaciones, precisamente, persiguen la referida finalidad.
Es de vital importancia fortalecer a la Guardia Nacional apoyados de la experiencia de la Sedena, pero con la directriz de la Secretaría de Seguridad; que se faculte al personal militar para efectuar operaciones de apoyo a las instituciones de seguridad pública y que la profesionalización de los miembros de la Guardia Nacional se efectúe en las instituciones de educación y centros de adiestramiento de las Fuerzas Armadas.
Es fundamental que, lo que ocurre en nuestro país (altos índices de inseguridad, delincuencia, crimen organizado y violencia en todos sentidos), tenga una estrategia puntual para abatirlo y consideramos que la Guardia Nacional nos dará esos resultados. De ahí que, proteger a la ciudadanía de la inseguridad es nuestro primordial objetivo que nos debe de unir.
