Antes de que comience la primavera, es un estupendo tiempo para terminar de tirar y renunciar a todo lo inservible, añejo y estorboso en nuestro camino. La energía primaveral viene con todo el impulso para que, haciendo lo que nos toca, nuestros proyectos, sueños y ambiciones estén apoyadas por la naturaleza.
Aquí le dejo algunas recomendaciones para los aspectos de la vida a los que podemos poner atención: hablando esotéricamente, nuestros ojos representan la mente, nuestra lengua corresponde al corazón y las manos y piernas del ser humano representan muestra voluntad, para que en nuestra vida se haga la Voluntad de Dios.
1. Ponga atención a sus decretos: “Dios se sienta en la punta de la lengua y reside en el corazón de cada hombre y mujer”, así que en el habla tenemos un tremendo poder curativo y creador. Deseche y elimine de su vocabulario todas aquellas sentencias que le resten autovalor, autoaprecio, autorespeto y autoconfianza.
Verifique si tiene resistencia a soltar estas programaciones, para trabajar de fondo en dejarlas para siempre. Las palabras son activas y vivas y contienen un poder tremendo. Tenga algo muy presente: el discurso de un individuo indica si sigue el camino de la oscuridad o el camino de la luz.
Nada es más dañino para uno mismo que el chisme, la crítica y el discurso negativo. Esto tiene tal grado de importancia que muchos maestros y maestras místicos afirman que omitir la ley espiritual del habla positiva evita el logro de la felicidad y el gozo que a cada uno nos corresponde, y que cuando se chismorrea o se calumnia a los demás, absorbemos su mal karma o su luz negra.
Así que puede elegir usar el poder de sus palabras para elevar y sanar, y verá cómo las cosas buenas empezarán a suceder con más frecuencia en su vida.
2. Cómo sentimos: el cuidado de lo que obstruye el camino del corazón es fundamental para sentir. Muchas veces nos vemos envueltos en la insensibilidad o la indiferencia, como capas que de autoprotección que hemos construido a lo largo de la vida, y aunque esto no es malo, sí resulta dañino cuando se convierte en grandes defensas de nosotros ante el corazón de los demás y ante el Universo.
Puede optar por ir deshaciendo las barreras que le aíslan del flujo vital. La afirmación de volverse como niños, se refiere sobre todo a que reaprendamos a conectarnos con la vida como cuando llegamos al mundo.
3. Lo que hacemos: nuestras acciones son producto de nuestras creencias y sentimientos, sin embargo, todo forma parte de un ciclo que se retroalimenta, así que también podemos poner en marcha acciones que sean congruentes con lo que deseamos pensar y sentir.
Por ejemplo, si usted requiere de dejar un mal hábito, aunque no esté convencido o no lo sienta, puede muy bien elegir dejarlo desde el plano físico. Tarde o temprano su cuerpo comenzará a sentir los beneficios, y esto mejorará las hormonas y neurotransmisores que impactarán en cómo se siente y cómo piensa.
Decida sabiamente sus actos y elija hacer lo que respalde sus deseos. Todo esto forma una triada sagrada de la que podemos tomar conciencia para limpiar y poner orden durante el periodo de la antesala para las próximas semillas de creación de la vida que anhelamos tener. Recuerde que usted es un poderoso Ser co-creador con el Universo.